Fabián Balbuena fue uno de los jugadores que más sonó hace un par de semanas para reforzar la defensa del Celta. Un rumor muy extraño, ya que varios medios brasileños afirmaban que sería jugador del equipo celeste en las próximas horas, y se referían al partido que disputaba su equipo, Corinthians, unas horas después, como el último antes de partir hacia Vigo para firmar por el Celta.
Horas más tarde el agente reconocía la oferta del Celta, así como de un club italiano, pero hablaba de otra superior. Los medios portugueses aseguraron que ese equipo era el Sporting de Portugal, pero dos semanas después el internacional paraguayo sigue en Brasil, y el presidente del “timao” ha asegurado que no han recibido ninguna oferta por el futbolista.
Suele pasar en el mundo del fútbol que los rumores a veces llegan del entorno del jugador, otras del seno de algún club, y en la mayoría de los casos de los propios representantes, que filtran interesadamente ciertas noticias para poner en el mercado a sus futbolistas. No hay mejor manera de enviar un mensaje a los equipos que pudieran estar interesados, que hacer que el nombre de un jugador llegue a los medios en forma de rumor.
Y eso parece que es lo que ha sucedido en estos casos. No sabemos si el Celta tenía un interés real en su contratación. Es posible que alguna vez acudiera a ver al jugador en directo, o que incluso contactase con el representante para conocer su situación, algo que hacen con muchos futbolistas que finalmente no llegan nunca a Balaídos, pero lo que es seguro es que no estaba casi cerrado, como afirmaba la prensa brasileña.
Por otro lado su contratación era muy compleja. Primero por su condición de extracomunitario, mucho más ahora que sabemos que en ese momento el Celta estaba ultimando la contratación de Araujo, un central sin pasaporte comunitario, que elevaría el número de jugadores no comunitarios hasta el límite permitido. Por otro lado, el futbolista percibe en el Corinthians un salario de 2 millones de euros. Totalmente inasumible para el Celta, y no porque no lo pueda pagar, sino por el desequilibrio que provocaría en el vestuario, y los problemas que tendría el Celta para cuadrar entonces el tope salarial impuesto por La Liga.
Ayer mismo, la prensa paraguaya volvía a hacerse eco del interés del Celta, probablemente basándose en las noticias publicadas hace un par de semanas. Hablan allí de cinco equipos interesados. De ser cierto sería un halago para el jugador. Si no es verdad, solo cabe felicitar al representante de Balbuena por su habilidad para que se hable de él en esta fase del mercado.
