Buen partido del Celta, que lo hizo casi todo bien, excepto finalizar las jugadas. Los de Paco Herrera fueron claramente superiores al Espanyol, pero no fueron capaces de superar la ordenada zaga perica y lograr un tanto que llevase la justicia al marcador. Ahora, todo se decidirá el próximo martes en Cornellá, donde ambos equipos podrían sacar su equipo de gala.
Equipo de gala que no jugó hoy, aunque cais no se notó. Muchos cambios con respecto al pasado sábado. Sergio en la meta, con Hugo Mallo, Vila, Catalá y Bellvís en la retaguardia. Bustos y Álex López en el pivote, con Abalo por banda derecha, Orellana por la izquierda, Joan Tomás como enganche, y arriba David Rodríguez.
Comenzó el Celta muy bien, con un Abalo vertiginoso por la banda derecha. El arousano fue el mejor mientras las fuerzas le acompañaron. Las primeras jugadas en ataque del Celta llegaron por la banda de Abalo, con centros a David, a los que el talaverano no llegaba o marraba. La jugada se repetía, y de vez en cuando, era Abalo el que probaba la jugada personal, midiendo la seguridad de Kiko Casilla.
Pero el canterano se fue apagando, y también el Espanyol se fue asentado. Weis, un futbolista de una calidad excepcional, ponía el peligro por parte perica en una primera parte muy igualada y con dos equipos muy valientes, a los que no les asustaba poner la zaga casi en la línea divisioria. La zaga celeste acompañaba la presión del Celta a la salida de balón blanquiazul, lo que dificultó la circulación de los de Pochettino. Tras el descanso entró Toni en lugar de Abalo, que había dado muestras de cansancio y tuvo problemas musculares en el tramo final de la primera parte.
Si en la primera parte el dominio del Celta fue notorio, en la segunda parte se acrecentó. El Celta seguía asumiendo riesgos y se volcaba al ataque en busca del gol que diese ventaja en el marcador. La posesión era abrumadoramente celeste, y los hombres de arriba buscaban espacios en una ordenadísima zaga rival que no dejaba apenas lugar para encontrar a Kiko Casilla.
Una segunda parte en la que el Celta abusó tal vez en exceso de la combinación, sin contundencia arriba, pero con una increíble capacidad de recuperación cada vez que se perdía el balón. Toni, que realizó un partido intenso, eléctrico, dando muestras de su calidad, Orellana o Joan Tomás, ejercían una presión axfisiante a la salida de balón perico, y si se superaba esta línea, Álex López y Bustos se encargaban de rebañar cualquier balón que pasase por sus dominios. Si a eso unimos que la zaga estuvo sobresaliente llegamos a la conclusión de que el Celta estuvo fantástico, pero le faltó el gol, y más que eso, crear ocasiones para marcar.
Además de Toni, en la segunda mitad entraron Iago Aspas y De Lucas, demostrando que el Celta mira de reojo la Liga, pero está muy pendiente de esta competición. El resultado podría ser mejor, pero no es malo del todo. No encajar siempre está bien para encarar la vuelta, donde el Celta podrá aprovechar su velocidad para buscar alguna contra que vuelce la eliminatoria a su favor. Lo más positivo es que le plantamos cara a un equipo de Primera.
FICHA TÉCNICA
Celta: Sergio, Hugo Mallo, Vila, Catalá, Bellvís, Álex López, Bustos, Dani Abalo (Toni, min.46), Joan Tomás (De Lucas, min.71), Orellana y David (Iago Aspas, min61) .
Espanyol: Kiko Casilla, Galán, Forlín, Amat, Víctor Álvarez (Canal, min.82), Baena, Cristian Gómez, Weiss (Rui Fonte, min.61), Víctor Álvarez, Dátolo (Verdú, min.61) y Álvaro.
Árbitro: Pérez Montero, del comité andaluz. Amonesto a Álex López, Galán
Campo: Balaídos, 6.503 espectadores
