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| Foto: LOF |
Charles Dias (Belém, 1984) ha perdido la titularidad que ostentó la pasada temporada en favor de Joaquín Larrivey. Poco acostumbrado al sabor del banquillo, el brasileño asume su rol con "respeto" y la misión de luchar como nunca para ganarse la confianza del 'Toto' Berizzo. Asimismo, valora el buen momento del equipo y augura un futuro prometedor al Celta.
Sin ocho internacionales, hoy han hecho una sesión en familia.
Ha sido diferente porque no están todos los compañeros, pero esta semana debe servir para coger tono físico, sobre todo los que no estamos jugando, y para que el míster nos diga los errores que estamos cometiendo e intentar corregirlos.
Cuando un equipo pierde a tantos jugadores por sus compromisos con la selección es señal de que la plantilla tiene un buen nivel.
Es bueno para el equipo y para el club. Sabemos que tenemos una plantilla muy buena, con internacionales, y la gente te respeta más. Los equipos contra los que jugamos te respetan más porque ven que hay gente que ha jugado Mundiales, como Fabi (Orellana) y Augusto, y eso nos viene bien.
¿Qué balance haría de estas dos primeras jornadas? ¿Están satisfechos con los cuatro puntos?
Satisfecho no, lo estaríamos si hubiésemos ganado los dos partidos. Pudimos hacerlo, pero hay que olvidar ya el último partido y pensar ya en el próximo, que es contra un gran equipo como la Real Sociedad y va a ser muy complicado tanto para nosotros como para ellos.
Las sensaciones en la recta final de la pretemporada y en los dos primeros compromisos oficiales han sido muy buenas. ¿Están contentos con el juego ofrecido?
Sí, pero sabemos que podemos mejorar muchísimo porque la temporada acaba de empezar y tenemos mucho margen de mejora todavía.
¿El calor que hacía en Córdoba pesó en el rendimiento del equipo?
Yo jugué allí dos años y el factor calor es complicado. Nosotros no estamos acostumbrados a jugar con ese tipo de temperaturas y lo notas muchísimo, sobre todo en la segunda parte. Se vio que estábamos asfixiados con el calor, pero tampoco es una disculpa porque el otro equipo también lo siente. Pudimos ganar, hicimos un buen fútbol pero en la segunda parte bajamos, creo que también por el calor.
¿La propuesta del Celta hizo que el desgaste fuese mayor? Lo digo porque un equipo que juega a un ritmo alto y presiona se desgasta más que uno que espera al rival.
Sí, pero nosotros no sabemos especular. Vamos a por el partido desde el primer minuto, a presionar. Tenemos jugadores para hacer eso. El año pasado se vio y esta temporada va a ser igual. Somos un equipo que quiere ganar desde el principio y cuando mete un gol busca marcar otro. Queremos hacer un fútbol bonito, presionando, teniendo el balón y metiendo goles.
La apuesta ideal para un punta.
Claro. El Celta sabe fichar a jugadores que tienen esa mentalidad y nos está yendo muy bien.
El equipo ha dado motivos a la afición para que se ilusione con la posibilidad de hacer una buena temporada. ¿A qué aspiran ustedes, cuál es su objetivo?
Nuestro objetivo es ir partido a partido, siempre con los pies en el suelo. La euforia la dejamos para nuestra afición, que se lo merece. Llevábamos unos años complicados, la temporada pasada dimos una muestra del fútbol que podemos hacer y ahora seguimos intentando trabajar siempre con humildad, trabajando a tope todos los días para que lleguen los partidos y consigamos hacerles disfrutar a ellos.
El Celta acabó la última Liga más cerca de Europa que de la zona de descenso. ¿No cree que al mantener y mejorar el bloque es lógico aspirar a algo más?
Prefiero ir partido a partido. No nos podemos equivocar para nada porque estamos jugando en la mejor Liga del mundo y cualquier equipo puede venir a tu casa y ganarte. Por eso tenemos que pensar en el próximo partido, en este caso contra la Real Sociedad, y no más allá. Así creo que podemos conseguir grandes cosas.
El presidente reveló el otro día que el club rechazó ofertas por siete jugadores de la plantilla. ¿El grupo se siente más reforzado o motivado al ver que no se ha desmantelado la plantilla?
Sí. Ha habido ofertas muy importantes por jugadores nuestros, pero el Celta es un equipo que quiere seguir creciendo todavía más y seguro que este año haremos una temporada muy buena, igual que la última. Que nuestros compañeros se queden hace que nos sintamos muy bien porque sabemos que podemos mejorar, hacer cosas muy bonitas y seguir creciendo como jugador de fútbol. Creo que el Celta es un club a seguir en todos los sentidos por su forma de trabajar, que está dando frutos, y dentro de pocos años creo que el Celta va a estar entre los grandes.
A lo largo de su carrera ha sido titular casi siempre en todos sus equipos, pero en esta ocasión le ha tocado empezar la temporada como suplente, si bien únicamente se han jugado dos partidos. ¿Duele, se lleva mal?
Hombre, la verdad es que se lleva mal. En todos los equipos estaba jugando, pero si he llegado a Primera División es porque nunca he bajado los brazos y no lo voy a hacer ahora. Hay que respetar al compañero que está jugando y al míster, tal y como hicieron conmigo la temporada pasada y en otros equipos. Sólo me queda seguir trabajando a tope, todos los días, y en los minutos que el míster me dé ir a muerte para en cada partido tener más minutos.
¿Siente que con la llegada de Larrivey la competencia es mayor que el año pasado?
Estamos en Primera División y siempre hay competencia. Es bueno para todos, para que nadie se relaje, y de esta manera el equipo seguirá creciendo. Nadie se puede relajar porque cualquiera de nosotros puede entrar o salir del equipo en cualquier momento.
