(EFE) El Atlético de Madrid, que recibirá al Celta de Vigo este domingo en el Wanda Metropolitano en la vigésima octava jornada de LaLiga Santander, acumula diez años sin perder como local un encuentro liguero contra los vigueses, que se impusieron en la Copa en 2016 en el Calderón.
La racha del conjunto rojiblanco como local ante el equipo celeste en Liga abarca cinco partidos seguidos sin perder y dos victorias consecutivas como local, cuatro triunfos seguidos si se tienen en cuenta los enfrentamientos ligueros en ambos campos.
Una buena racha no exenta de dificultades, ya que el conjunto rojiblanco se impuso la pasada temporada en el Vicente Calderón con una remontada en los últimos cinco minutos (3-2).
Dos goles en los minutos 86 y 88, del belga Yannick Carrasco y el francés Antoine Griezmann, dejaron los tres puntos en feudo rojiblanco después de que el Celta se adelantara en el minuto 6 gracias al argentino Gustavo Cabral y respondiera al empate de Fernando Torres con otro tanto del sueco John Guidetti.
Un 2-0 en la temporada anterior (Torres y Griezmann), un 2-2 (Miranda y Godín; Pablo Hernández y Nolito), un 2-1 (Diego Costa en dos ocasiones; Nolito), y un 1-0 (Adrián) completan la racha invicta del Atlético como local en Liga ante su rival de este domingo.
Para encontrar el último triunfo vigués en feudo colchonero en la Liga hay que remontarse hasta la temporada 2006-07, la del descenso del Celta a Segunda División, en la que permaneció cinco temporadas.
Fue un 9 de junio de 2007, penúltima jornada de Liga en el Vicente Calderón, entre un Celta que apuraba sus opciones de permanencia, mientras el Atlético luchaba por entrar en competición europea.
Dos goles del argentino Maxi Rodríguez para los rojiblancos no fueron suficientes frente al doblete del brasileño Fernando Baiano y un gol de Yago Yao, para un 2-3 que daba vida a los vigueses. Al final, ni el Celta consiguió salvarse, ni el Atlético ir a Europa directo, sino que tuvo que pasar por la Copa Intertoto.
No obstante, el Celta tiene un recuerdo muy reciente de triunfo en feudo rojiblanco, de hace apenas dos años en el estadio Vicente Calderón, correspondiente a los cuartos de final de la Copa del Rey del curso 2015-16.
Llegaba la eliminatoria de un 0-0 en la ida Balaídos, ventaja para el Celta en caso de empate con goles por el valor doble de los tantos en portería contraria. Al conjunto entonces dirigido por el argentino Eduardo Berizzo no le hizo falta.
Se adelantó el equipo visitante con un cabezazo del chileno Pablo 'Tucu' Hernández, empatado menos de diez minutos después por Griezmann. Marcó Guidetti en la segunda mitad, y siete minutos después Hernández hizo el 1-3. El postrero gol del argentino Ángel Correa fue inútil para evitar la eliminación del Atlético.
En aquel partido, un 27 de enero en el Vicente Calderón, los aficionados vigueses desplazados a Madrid hicieron chanza pidiendo a Diego Simeone que sacara al argentino Augusto Fernández, fichaje de invierno que viajó de Vigo a Madrid ese mismo mes.
Hace unas semanas, el mismo Augusto fue protagonista de otro cambio de aires a mitad de temporada, de Madrid a Pekín para jugar en el Beijing Renhe de la Superliga china.
