El Celta visita este domingo el Wanda Metropolitano, un estadio en el que el Atlético de Madrid aún no conoce la derrota en competición liguera desde su inauguración en el mes de septiembre del año pasado. Los de Simoene han convertido su nueva casa en un feudo inexpugnable, en el que de momento solo ha podido vencer el Chelsea en la Champions League, pero en Liga siempre ha logrado puntuar, y en la mayoría de los casos ha ganado.
Solo Barcelona, Villarreal, Real Madrid y Girona han conseguido pescar en el estadio colchonero, así que para el Celta será un nuevo reto, el de convertirse en el primer equipo capaz de vencer a los atléticos en su nuevo estadio en competición liguera. El Vicente Calderón, antiguo hogar de los madrileños, era uno de los estadios que peor se le habían dado al Celta históricamente, así que tal vez un cambio de escenario puede revertir esa situación.
El equipo celeste llegará a este encuentro con casi todos los jugadores a disposición de Unzué, con la excepción de Fontàs, que ya no estaba entrando en las últimas convocatorias, por lo que su ausencia no será especialmente grave. Eso sí, el Celta tendrá que mejorar las prestaciones mostradas en las tres últimas salidas, que cuenta por derrotas, en partidos en los que no mereció mucho más, tal vez salvo en Mendizorroza.
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