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| Foto: RC Celta |
Partido insulso el disputado esta noche entre el Sporting de Braga y el Celta en el bonito Estadio Municipal de la ciudad lusa. El partido finalizó con el resultado inicial después de que ambos equipos estuviesen más pendientes de ajustar la defensa que de buscar la portería rival.
La novedad en el Celta fue la presencia de inicio de tres centrales, un sistema que contempla Antonio Mohamed para esta temporada. Roncaglia, David Costas y Néstor Araujo fueron los elegidos, acompañados en los laterales por Hugo Mallo y Juncà. Sergio fue el guardameta titular. En la medular el Celta formó con Lobotka, Okay, Brais Méndez y Emre Mor, mientras que Claudio Beauvue fue el delantero centro.
Poco o nada reseñable en la primera mitad, salvo la lesión de Okay Yokuslu. El internacional turco se retiró a los 24 minutos con un esguince de grado II en el tobillo derecho, que probablemente le impida estar para el comienzo de la Liga el 18 de agosto. En su lugar entró Emmanuel Apeh, que volvió a dejar detallitos interesantes, uno de ellos fue la mejor ocasión del Celta en la primera mitad, tras un centro desde el pico del área al que no llegó por milímetros Beauvue.
Poco más reseñable de un primer acto marcado por el centrocampismo, con el Celta sufriendo en la salida de balón ante la presión alta de los lusos y sin apenas presencia en ataque. Tras el descanso seis cambios. Entraron Iván Villar, Jozabed, Dennis, Mazan, Cabral y Juan Hernández por Sergio, Emre Mor, Beauvue, Juncà, Costas y Brais.
Posteriormente también entrarían Hjulsager, Kevin y Borja Fernández, este último ya en tiempo de descuento. Tras la entrada de Kevin por Araujo, el equipo cambió de sistema pasando a un 4-4-2 con dos centrales. La segunda mitad tuvo momentos de dureza excesiva por parte del equipo portugués, y al igual que en la primera mitad poco fútbol.
En la recta final llegaron algunas ocasiones para el Celta, a pies de Hjulsager, y con el tiempo cumplido un centro raso desde la banda de Jozabed al que no llegó Apeh con suficiente ventaja para orientar el remate a la portería. Con esa ocasión se acabó un partido que no será recordado por su belleza, pero servirá para que el equipo se siga rodando de cara a La Liga.
