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| Foto: Ander Gillenea |
(EFE) Fabián Orellana ha logrado batir el número de partidos de un futbolista chileno en la Liga española. Lo hizo hace dos jornadas ante el Alavés y este domingo sumó otra bala más a su cartuchera para seguir así aumentando sus cifras y alejándose del jugador que hasta hace poco reinaba en este particular podio, que era nada menos que Claudio Bravo.
Con un total de 234 partidos, supera los 232 del guardameta que militó en la Liga desde 2006 hasta 2017. Y quien cierra los tres primeros puestos no es un futbolista cualquiera, sino que se trata de Iván Zamorano, que sumó 196 choques en España.
Orellana aterrizó en España en la temporada 2009-2010, en calidad de cedido por el Udinese al Xerez y una temporada más tarde recaló en las mismas condiciones en el Granada, club con el que estaba vinculado la entidad italiana.
Aunque el Granada se hizo con la propiedad del jugador en 2011 el futbolista chileno fue cedido con opción de compra al Celta de Vigo, si bien el jugador regresó al club andaluz temporalmente en junio de 2012 puesto que el club vigués no se quedó en propiedad al futbolista hasta enero de 2013.
Militó en el Celta con éxito hasta enero de 2017, momento en el que su entonces técnico, el argentino Eduardo Berizzo, lo apartó del equipo y acabó siendo cedido con obligación de compra al Valencia pocos días después durante el mercado invernal.
Sin embargo, nada más llegar Marcelino García Toral al Valencia descartó a Orellana y la entidad de Mestalla lo cedió por una temporada al Eibar pero con la obligatoriedad de compra por 2 millones de euros si el club armero lograba la permanencia.
Orellana también se sitúa en un interesante quinto puesto en la clasificación de goleadores chilenos en España, por detrás del indiscutible número uno en esta faceta Iván Zamorano, Alexis Sánchez, Jorge Contreras y Francisco Molina.
Su carácter peculiar (no concede entrevistas) le ha llevado a tener algún problema en varios clubes. Sin embargo, ha encontrado en el Eibar y en Mendilibar la estabilidad que necesitaba y lo está demostrando en el verde, en una temporada en la que está siendo el mejor jugador azulgrana.
Mendilibar lo calificó de forma cariñosa como un "ratoncito verde", una especie rara que nunca sabes por dónde te va a salir en el campo, y dijo que había que "entender" al chileno, hablando de su peculiar forma de ser, porque, de lo contrario, "te puede mandar a tomar por saco".
Si nada cambia, Orellana podrá seguir poniendo tierra de por medio con respecto a Claudio Bravo y llegar a una cifra difícilmente superable por algún compatriota en los próximos años.
