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| Foto: José Carlos León/Heraldo |
Borja Iglesias volvió a anotar un gol el pasado fin de semana. En esta ocasión fue ante el Nàstic, en el Nou Estadi de Tarragona. Al hacerlo, colocó su dedo índice sobre su boca, en un claro gesto de silenciar a la grada local. No es nada nuevo. El jugador santiagués no inventó nada, simplemente reprodujo un gesto que antes han hecho popular otros.
Raúl lo hizo en su día en el Camp Nou, un gesto icónico que perdura casi 20 años después. No hace mucho fue Piqué en el estadio del Espanyol. Al bueno de Borja Iglesias se le ha ocurrido hacer semejante gesto vistiendo la camiseta del Real Zaragoza. Y eso tiene consecuencias.
La Liga de Fútbol Profesional ha denunciado este martes al canterano celeste ante el Comité de Competición, dependiente de la Real Federación Española de Fútbol. Lo habían advertido tras el gesto de Piqué ante el Espanyol, producido hace un par de semanas. A partir de ese momento, cualquier gesto que pudiese generar crispación en el público, o que se considerase como contraria a buen orden deportivo, incluso aunque esta no quedase registrada en el acta arbitral, sería trasladada a dicho Comité para la depuración de las responsabilidades deportivas oportunas.
El periodista Isaac Fouto, experto en temas arbitrales y disciplinares, escribió un tuit ayer en el que adelanta que no habrá partidos de sanción para el futbolista, aunque podrían solicitar un castigo que iría de uno a tres partidos. Para fouto “lo normal: apertura de expediente o info reservada, y luego decidir si es un gesto ofensivo. Aún así está el atenuante de la disculpa. No creo que haya sanción”, apuntaba en su cuenta de Twitter.
La disculpa del jugador llegó tras el partido, añadiendo los motivos que le habían llevado a realizar ese gesto: “Fue duro escuchar toda la noche, sin motivo alguno, insultos personales y alusivos a mi familia. Si alguien se sintió ofendido por mi gesto, le pido perdón sinceramente. El gesto, que surgió espontáneamente en ese momento de alegría por el gol, era para los que me insultaron fuertemente durante el partido, no para todo el mundo. Insisto en pedir disculpas al resto de la gente”, comentó el jugador en declaraciones recogidas por El Heraldo.
La Liga se quiere poner dura con este tipo de actuaciones, pero lo hace con Borja Iglesias. Recordemos que hace unas semanas también trasladó un caso de posible racismo que afectaba a Iago Aspas, después de que unos meses antes Carvajal insultase al propio Lerma. La diferencia es que en el caso del madridista hay pruebas videográficas, en el caso de Aspas solo las palabras del jugador colombiano. ¿En qué caso actuó La Liga?.
