Con el equipo instalado desde hace varias jornadas en los puestos de descenso y sólo nueve partidos por disputarse, el club ha decidido aplazar las conversaciones con los jugadores que acaban contrato hasta saber si el equipo seguirá en Primera o, por el contrario, regresa al pozo de la Segunda División. Y no se trata de una situación que afecte a un número reducido de futbolistas, sino que son nueve los miembros del primer plantel –prácticamente la mitad– cuya relación contractual con la entidad acaba el 30 de junio.
Hay cuatro futbolistas que están cedidos en Vigo –Javi Varas (Sevilla), Park (Arsenal), Pranjic (Sporting de Lisboa) y Demidov (Eintracht)– y su continuidad no se contempla si el Celta desciende a Segunda División. Aun continuando en Primera, tanto el delantero surcoreano como el polivalente centrocampista croata tienen escasas opciones de seguir vistiendo la casaca celeste, mientras que en el caso de Varas y Demidov el factor económico y la voluntad de ambos serán fundamentales.
A estos cuatro cedidos hay que añadir los cinco futbolistas que acaban contrato: Roberto Lago, Carlos Bellvís, Natxo Insa, Mario Bermejo y Quique de Lucas. En el caso de Bellvís, el Celta tiene la posibilidad de prorrogar unilateralmente su contrato hasta 2014 y el lateral valenciano ha asegurado en diversas ocasiones que su deseo es continuar en Vigo.
Roberto Lago es el único de los cinco al que el club vigués presentó una oferta de renovación, pero las negociaciones no llegaron a buen fin, al contrario de lo que sucedió con otros canteranos como Iago Aspas, Hugo Mallo, Andrés Túñez, Álex López o Borja Oubiña.
En cuanto a Mario Bermejo, Natxo Insa y Quique de Lucas, el club todavía no se ha puesto en contacto con ellos para informarles de cuáles son sus intenciones. Lo hará cuando sepa en qué categoría competirá el curso que viene, factor que los responsables de la entidad tendrán muy en cuenta a la hora de valorar su continuidad.
Por tanto, habrá que esperar al próximo mes de junio –o mayo si la permanencia se alcanza antes de la última jornada– para aclarar el futuro de estos nueve futbolistas, pero no son los únicos cuyo porvenir está rodeado de interrogantes.
Es el caso, por ejemplo, de Sergio Álvarez. El portero de Catoira, lesionado hasta final de curso, tiene contrato hasta 2015, pero el club vigués puede hacer uso de una cláusula para rescindir unilateralmente la relación este verano.
Por otro lado, hay jugadores que pueden abandonar la entidad aun teniendo contrato en vigor, ya sea porque el Celta no cuenta con ellos o porque hay otros clubes de un potencial económico superior interesados en hacerse con sus servicios. Este último es el caso de Iago Aspas, al que en Valencia ya dan prácticamente por fichado, aunque está por ver si el club 'che' tiene la capacidad de hacer frente a los diez millones de euros que figuran como cláusula de rescisión en el contrato del moañés.
A este mar de incógnitas hay que añadir la situación de los jugadores cedidos en otros clubes –Jota, David Rodríguez, Yoel, Cristian Bustos y Dani Abalo– y la imposibilidad de retener a los futbolistas más destacados en caso de descenso.
Sólo el tiempo convertirá en certezas esta serie de incertidumbres, empezando por la continuidad del director deportivo del club, Miguel Montes Torrecilla, cuya etapa en el Celta parece estar a punto de llegar a su fin.
Borja Barreira / Atlántico Diario