El Celta ha conseguido un sufrido y trabajado punto en uno de los campos más complicados de la categoría. Con este empate se sitúa momentáneamente fuera de los puestos de descenso. Carvalhal puso en liza tres centrales, con carrileros largos, y palió la baja de Aspas y Larsen con la presencia de Paciência como único delantero.
Las bajas marcaron el once inicial del equipo vigués, que salió de inicio con Marchesín en portería, defensa de tres centrales con Mingueza, Aidoo y Unai Núñez. Por delante de ellos Renato Tapia y Gabri Veiga, con Cervi y Carles Pérez por banda, y Paciência como faro ofensivo.
Salió bastante bien el Celta, que merodeó la portería rival en los primeros compases del partido, pero con el paso de los minutos el Rayo se fue encontrando más cómodo y se hizo con el control del juego, aunque sin inquietar en absoluto la meta de Marchesín.
El Celta esperaba atrás, con las líneas muy juntas y buscando dar el golpe en alguna contra. Pudo hacerlo Carles Pérez en una vertiginosa carrera por la banda derecha con la que consiguió plantarse ante el meta franjirrojo pero resolvió mal, cuando tenía línea de pase para Paciência.
El Rayo movía el balón con calma, buscando las bandas, que tan buenos frutos suelen darle, pero la zaga céltica estuvo a gran nivel durante todo el partido, evitando males mayores. Cuando no llegó la defensa, apareció Marchesín imponiéndose en el juego aéreo.
En el minuto 39 Aidoo heló el corazón de la afición céltica. Se hizo un lío con el balón a escasos metros de la portería y la rápida salida de Marchesín evitó que Álvaro García se aprovechase del error del ghanés.
En la segunda mitad se asentó mejor en el terreno de juego, y consiguió mantener la posesión más tiempo. Al cuarto de hora llegó el primer aviso con un centro lateral de Javi Galán que remató de primeras Paciência. El balón no cogió portería, pero fue una muestra de las intenciones de los celestes.
A renglón seguido llegaron dos disparos consecutivos de Cervi que llevaron peligro, especialmente el primero, ante el que tuvo que intervenir Dimitrievski.
A poco menos de media hora para el final saltó al campo el renqueante Iago Aspas, con una protección en uno de sus muslos, sustituyendo a Paciência. El moañés gozó de una buena ocasión unos minutos después tras un pase profundo de Kevin, pero no logró conectar bien el disparo con su pierna derecha.
En el minuto 72 llegó el segundo cambio del Celta, con la salida de Kevin Vázquez, a quien se le hizo largo el partido. Pablo Durán ocupó su posición como carrilero por la banda derecha, una demarcación inédita para el de Tomiño. Unos minutos después completaría su cupo de cambios Carvalhal con la entrada de Óscar Rodríguez y Fran Beltrán en lugar de Tapia y Gabri Veiga.
En los últimos minutos adelantó líneas el Rayo Vallecano buscando el gol de la victoria, y gozó de una buena ocasión tras un centro lateral que acabó sacando con un gran mano Marchesín. Al margen de esta jugada, el Celta defendió muy bien todos los ataques rayistas y acabó llevándose un trabajado y merecido punto.
