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| Foto: Ricardo Grobas/Faro de Vigo |
El Celta recibe esta noche (21:00) al Girona, en el partido que abre la séptima jornada de esta Liga en la que el equipo vigués ha arrancado de forma un tanto dubitativa, por lo que una victoria ante el equipo catalán será fundamental para encarar con buen ánimo el segundo parón por los partidos de selecciones, que provocará que la Liga no vuelva hasta dentro de 15 días.
Es la primera visita del equipo de Montilivi en la máxima categoría puesto que se trata de un debutante, pero fue uno de los equipos habituales durante la etapa del Celta en Segunda División, así que podemos definirle como un viejo conocido. También lo será para Unzué ya que su entrenador, el soriano Pablo Machín, es amigo desde la época del técnico navarro en el Numancia.
Y esta será una de las claves, ya que Machín es un entrenador bastante diferente a lo común. Su equipo tiene un esquema poco habitual, con tres centrales, dos carrileros largos, y mucha gente por dentro, con dos pivotes y dos mediapuntas. Arriba Christian Stuani, que intentará dar un salto de calidad a su equipo. Así pues, el Girona no solo es un equipo que se sabe encerrar y defender su portería, sino que además sabe buscar la portería contraria. Su arranque liguero fue esperanzador, pero lo cierto es que ahora mismo está inmerso en una pequeña crisis que le ha llevado a acumular 422 minutos sin encontrar la portería contraria.
Por su parte, el Celta intentará refrendar las buenas sensaciones ofrecidas en Eibar, sobre todo en cuanto a la efectividad, ya que el juego hasta el 0-3 fue bastante discreto. Los de Unzué aprovecharon 3 acciones a balón parado para dejar resuelto el partido. Una asignatura pendiente del Celta en los últimos años, en los que era muy poco frecuente encontrar goles a través de jugadas ensayadas. Con esa mejoría, y la mostrada en cuanto a juego en la segunda mitad ante el Eibar, el equipo celeste debería dar un salto y confirmar esa mejoría con una victoria que deje satisfecha a una afición que sigue sintiendo morriña de tiempos pretéritos, pero que debe empezar a mirar con optimismo al futuro.
Muchas dudas también en torno al once que pondrá en liza Juan Carlos Unzué. Ante el Eibar realizó una serie de cambios que no sabemos si tendrán continuidad en este encuentro. Por ejemplo la portería, donde Rubén Blanco fue el titular. ¿Seguirá el de Mos o volverá Sergio?. Veremos cual es la decisión del preparador celeste. También hubo cambios importantes en el centro del campo, donde Jozabed cedió la titularidad en favor de esa dupla de pivotes que formaron Pablo Hernández y Lobotka, con Daniel Wass más adelantado. En Ipurúa funcionó y el navarro podría optar por repetirla.
Después está el tema Guidetti. El pasado domingo recuperó las sensaciones disputando unos minutos, pero es evidente que Maxi está a gran nivel y es difícil apearlo de una titularidad que se ha ganado a pulso. Además, hay que seguir pendientes de la evolución de Emre Mor, que seguramente dispondrá de minutos también esta noche para demostrar su adaptación al sistema. Todo eso esta noche a partir de las 21:00. Bienvenidos a Balaídos.
