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| Foto: Ricardo Grobas/Faro de Vigo |
Dijo Eduardo Coudet en la previa del partido ante el Real Madrid, que si le aseguran que Iago Aspas no volverá a marcar en los próximo mil días, seguiría poniéndolo de titular sin dudarlo. Seguramente él y cualquier entrenador, salvo que fuese seleccionador. Aspas no necesita marcar para demostrar que es uno de los mejores jugadores de La Liga en la actualidad.
Dicho esto, el moañés atraviesa su peor racha en Primera División con la camiseta del Celta desde su debut en 2012. Ya son ocho partidos sin goles del ariete céltico, aunque en el partido de ayer, sin marcar, volvió a ser uno de los más destacados, y estuvo muy cerca de marcar, con un disparo al palo que en ese momento hubiese supuesto la remontada ante el todopoderoso Real Madrid.
Su sequía goleadora coincide con la eclosión de Santi Mina, que ya suma siete tantos esta temporada, y que en las últimas semanas se está convirtiendo en el goleador de referencia de este Celta. Con todo, y a pesar de no marcar goles en 2021, Aspas ha participado activamente en un porcentaje muy alto de los tantos célticos, bien dando la asistencia definitiva, o el pase que cambia la jugada y da ventaja a sus compañeros. Ese es Aspas. Todos nos alegramos cuando marca, pero sobre todo estamos mucho más tranquilos cuando juega.
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