Empezó bien la cosa, con un gol de Apeh a los 13 minutos, pero el tramo final de la primera parte fue muy malo para el Celta, que se iría al descanso perdiendo 3-1 tras los goles de Nacho (23), Bernal (33, penalti) y Fraile (39).
En la reanudación mejoraron los de Jacobo Campos, y llegó el 3-2 por medio de Jacobo, cuando todavía quedaba media hora por delante para intentar la remontada, pero en el 70 llegó un palo casi definitivo con la expulsión de Fran Vieites. El Celta ya había consumido los tres cambios, por lo que se vio obligado a poner a un jugador de campo bajo los palos. El elegido fue Pampín.
Quedaban por delante 20 minutos para intentar remontar, con uno menos y con un jugador de campo bajo los palos. Pues ahí empezó el milagro. Al borde del tiempo reglamentario Jacobo marcó el empate con un gran lanzamiento de falta, y ya en tiempo de descuento, Apeh, tras una galopada por la banda puso el increíble 3-4 que daba los tres puntos al Celta en una victoria totalmente imposible.
El filial se sitúa con 7 puntos, en una zona más tranquila de la tabla tras vencer al invicto Peña Deportiva.
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