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| Foto: La Verdad |
El Cartagena será el próximo rival del Celta B en la lucha por el ascenso. El histórico efesé es uno de los gallitos de la categoría, y viene de ser derrotado por el Rayo Majadahonda en una de las dos eliminatorias de campeones, que le permitiría ascender directamente a Segunda División.
Fue, además, de forma dramática. El Cartagena logró un 2-1 en el partido de ida, y estaba manteniendo el 0-0 en el marcador que le convertía en equipo de Segunda División. El colegiado decretó 7 minutos de descuento, y fue en el minuto 97 cuando el Rayo Majadahonda logró el gol del ascenso, marcado en propia puerta por un jugador del Cartagena.
El equipo blanquinegro quedó totalmente destrozado, con desoladoras imágenes de sus futbolistas en el terreno de juego. Toda la crueldad del fútbol se cebó con el equipo murciano, que llegará tocado a la eliminatoria contra el filial celeste: “Es difícil que sea más cruel. Ha pasado lo que queríamos que pasara, sin el último tramo. Tuvieron la pelota sin hacernos daños, y no recuerdos ocasiones claras del Majadahonda, pero al final puede pasar esto. En el 96 tiran un saque de banda y nos lo marcamos en propia puerta. Si dicen que el Cartagena va asociado al sufrimiento, hoy con esto se resume”, lamentó Alberto Monteagudo, técnico del Cartagena al final del partido.
El Cartagena coincidió con el Celta en aquellos duros años en Segunda División, siendo alguna temporada un equipo que peleaba por el ascenso. De allí procedía De Lucas cuando fichó por el Celta, Pero los caminos de ambos equipos se separaron en 2012. El Celta ascendió a Primera División, y el equipo murciano bajó a Segunda B. Desde entonces lleva seis temporadas intentando regresar a la categoría de plata, convertido en uno de los equipos de la categoría de bronce con mayor masa social.
Por eso existen ciertas urgencias en la ciudad, y pudo haber pesado a los jugadores del Cartagena en la recta final del partido ante el Rayo. Su entrenador cree en la recuperación de su equipo: “Igual que hemos caído hoy nos levantaremos mañana. Pelearemos la siguiente eliminatoria y estoy convencido de que la vamos a superar”, afirmó, aunque reconoció la dureza de lo sucedido: “El equipo está muerto ahora mismo. Llevaba tiempo sin ver a tantos hombres llorar juntos”. concluyó.
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