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| Foto: David Ramos |
El 16 de septiembre de 2013 fue inaugurado el Nuevo San Mamés, que sustituía a una de las leyendas del fútbol español. Allí estaba el Celta, que tuvo el honor de participar en ese partido inaugural correspondiente a la cuarta jornada de La Liga. Incluso un jugador del Celta, Charles, fue el encargado de marcar el primer partido en este nuevo escenario.
Pero San Mamés no es un estadio que se le de precisamente bien al Celta, que ha jugado desde entonces en seis ocasiones y no se ha ido nunca con una sonrisa. Solo en el partido de Liga de la Temporada 2014-15 logró arrancar un punto. Fue lo más cercano a la felicidad, ya que incluso ganando, el Celta salió triste de San Mamés.
En los seis enfrentamientos ante el Athletic en este escenario ha perdido cuatro partidos, ha empatado uno y ha ganado otro, pero incluso esa victoria no pudo ser celebrada ya que se produjo en un partido de la Copa del Rey. El Celta había perdido en Balaídos 2-4 así que el 0-2 logrado en San Mamés fue insuficiente para apear al equipo bilbaíno de este competición.
El resto de encuentros se cuentan por derrotas, algunas especialmente duras por tratarse de remontadas de los bilbaínos, algo que sucedió en las dos últimas visitas, no exentas de polémicas. San Mamés es un estadio que generalmente se le resiste al Celta a lo largo de la historia, y en el que no será sencillo ganar, pero el Celta quiere salir mañana sonriendo de él por primera vez.
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