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| Foto: LFP |
Solo un jugador de la primera plantilla no se ha estrenado en partido oficial esta campaña. Se trata de Iván Villar, que ha entrado en alguna convocatoria, cuando Rubén Blanco estaba sancionado, pero no ha llegado a debutar todavía ni en Liga ni en Copa, donde muchos esperaban que podría ser el elegido. No fue así, y Unzué decidió que Ipurúa jugase Sergio.
La decisión de que Iván Villar forme parte del primer equipo es exclusivamente del propio futbolista. El club quería que siguiese en el filial, alternando con el primer equipo, pero una cláusula en el contrato del guardameta de Cangas le permitía ascender y decidió ejecutarla contra el consejo del club. El propio Felipe reconoció semanas después que intentaron convencer al canterano de la idoneidad de seguir en el filial. No tuvieron éxito.
Es pronto para saber si ha sido un acierto o un error por parte de Iván Villar. A día de hoy seguramente sería una tentación pensar que se ha equivocado, pero nunca sabemos lo que puede pasar en el futuro. El Celta cuenta con tres guardametas de la cantera, y veremos el año próximo si siguen los tres o se produce alguna baja. Situarse como jugador de Primera División, aunque sin minutos, puede servir para su currículum, pero pasar un año en blanco seguramente no ayudará.
De todos modos, la temporada es muy larga, y pueden pasar muchas cosas que tal vez lleven a que Iván Villar disponga de minutos. En todo caso, esas mismas circunstancias le permitirían jugando aunque estuviese en el filial, donde seguiría rodándose y acumulando minutos en competición oficial en un equipo que pelea por cosas importantes en la categoría de bronce.
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