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| Foto: Octavio Passos/Getty Images |
El Celta recibe esta noche (21:00) en partido aplazado correspondiente a la jornada 21 de la Liga, que en su momento se tuvo que suspender debido al temporal que azotó Vigo en el mes de febrero. Llega el Celta a este partido sin nada más que la honra en juego, con un rival enfrente que se juega la Liga. Hace tres años en idéntica situación perdieron los blancos, quedando sin opciones para hacerse con el título.
Berizzo advirtió ayer de la importancia del partido, no por lo que tenga en juego el rival, que es algo secundario, sino para recuperar buenas sensaciones ante un público que ha sufrido bastante en los últimos partidos de Liga. La Europa League consumió casi todas las energías de los célticos, que tuvieron que hacer equilibrios para llegar frescos al final de la temporada, lo que ha costado varios disgustos del Celta como local.
El equipo celeste acumula cinco derrotas consecutivas, y este partido puede ser un bálsamo para acabar una gran temporada con un buen sabor de boca. Por delante tiene este partido y el del próximo fin de semana ante la Real Sociedad. Dos partidos para despedir una intensa temporada que recordaremos dentro de muchos años.
El preparador argentino no adelantó ayer nada sobre el equipo que pondrá en liza, aunque todo apunta a que se parecerá mucho al de gala, pendientes de la evolución de la lesión de Radoja. Si el serbio está listo seguramente sea titular tras descansar el pasado fin de semana. La motivación es importante ante un rival de la entidad del Real Madrid, incluso aunque no se juegue nada, así que seguramente esta noche veamos una buena versión del equipo vigués. Ojalá sea suficiente.
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