La selección chilena es una de las que más hemos seguido en los últimos tiempos debido a la fuerte presencia de jugadores célticos. En la pasada Copa América, el combinado dirigido por Pizzi se proclamó campeón de Europa con tres futbolistas del Celta en sus filas.
Para muchos aficionados, el hecho de tener a muchos internacionales, o verse representado con tres jugadores en el combinado trasandino, es un motivo de ánimo, aunque hay otros a los que no le gustan este tipo de situaciones. Para estos últimos, lo que está sucediendo en la selección chilena parece darles la razón.
Los tres jugadores chilenos del Celta se han lesionado en alguna ocasión durante los últimos meses mientras estaban convocados con Chile. Y es curioso, porque están mucho más tiempo con el Celta que con la selección. El primero fue Marcelo Díaz, que se ha lesionado hasta tres veces desde que es jugador del Celta, la última vez durante la pasada Copa América.
En esa misma competición se lesionó Pablo Hernández, que no pudo realizar la pretemporada con el primer equipo, aunque da la sensación de estar en plena forma. El último en sumarse a esta lista de desgracias es Fabián Orellana. El extremo céltico sufrió una lesión en su su cuadríceps durante un entrenamiento con la selección chilena, y completa el círculo maldito de lesionados celestes con Chile.
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