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| Foto: David Ramos |
Si la televisión, la radio o la prensa nacional en general, estuviese más atenta a lo que sucede eb un campo de fútbol, el duelo que prometen Hugo Mallo y Neymar generaría la expectación que merece realmente. Este enfrentamiento, entre dos jugadores rivales con un único objetivo, es a día de hoy uno de los más bonitos de toda la Liga, por su igualdad y por lo que tiene ya a sus espaldas, con imágenes que alimentan su leyenda.
El fútbol moderno nos ha hecho perder la costumbre de entender el fútbol como una batalla que se gana soldado a soldado. La zona ha hecho desaparecer los marcajes al hombre, pero aún así se producen duelos reiterativos por la posición de los jugadores. Berizzo ha importado nuevamente las marcas individuales, la persecución sin límites, que será lo que veamos mañana, con Jonny y Messi por un lado, y con Hugo Mallo y Neymar por el otro.
En los años setenta se hizo muy popular el duelo mantenían Johan Cruyff y José Antonio Camacho cada vez que sus destinos se cruzaban. Los hinchas celtistas vivirán un duelo del que se hablará dentro de muchos años. Esperemos que, como sucede casi siempre, Hugo Mallo acabe por desesperar al brasileño.
En los últimos enfrentamientos ya hemos visto a un Neymar desesperado. Hugo Mallo puede llegar a ser un marcador desesperante, de los que insisten una y otra vez y acaban por desesperar la delantero, especialmente si este no tiene su día. En el último duelo en el Camp Nou lo pudimos ver, mientras que en el partido de la segunda vuelta del pasado curso, jugado en Balaídos, dejó una fea imagen cuando Neymar le lanzó sus mocos al de Marín. Imágenes, en definitiva, que seguirá dejando un duelo entre dos jugadores que van al límite. Puro espectáculo.
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