Opinión - El doble y engreído rasero de Javier Tebas

Foto: EFE

Como él mismo manifiesta con esa sonrisa de quien se siente rey del 'sarao' y gustoso foco de la atención mediática, a Javier Tebas, presidente de la Liga de Fútbol Profesional (LFP), le gusta meterse en charcos.

Durante la reciente presentación del acuerdo para que la Copa del Rey pueda verse a través de Youtube en 17 países, le preguntaron por la 'famosa' denuncia de un árbitro asistente sobre las supuestas presiones que habría recibido para perjudicar al FC Barcelona en el caso de que fuese la persona elegida para pitar el próximo 'clásico'.

La actuación arbitral de Clos Gómez desesperó al Celta frente al Real Madrid y tras la expulsión de Cabral, Orellana se 'calentó' aludiendo a una posible llamada de teléfono para perjudicarles. "Orellana es un gran jugador de fútbol, pero de esta cuestiones creo que no entiende. Estos 'frikismos' no se deben permitir en el fútbol", afirmó sobre las dos vertientes del asunto con seriedad en el rostro a modo de reprimenda verbal. 

Los periodistas también quisieron saber su opinión sobre la posible sanción a Mascherano tras la tarjeta roja recibida por el jugador azulgrana ante el Eibar por decirle al asistente "la concha de tu madre". Ahí, esbozó una sonrisa y soltó la siguiente argumentación: "Si fuese en Argentina lo valoraría de una forma diferente. No me da la sensación de que sea un insulto muy grave en el entorno español. No sé si lo habrá dicho o no. Los Comités lo valorarán. Ni sé qué hizo ni estaba viendo el partido a esas horas. Me dolería que Mascherano o cualquier jugador no pueda jugar el clásico, pero los árbitros deben consignar las faltas de respeto". 

¿Se imaginan la misma declaración de Tebas cambiando a los protagonistas de ambas acciones? Este milagro solamente sería posible en un cuento de hadas, el idílico universo en el que reside el presidente de la Liga de Fútbol Profesional con su doble y engreído rasero.

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