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| Foto: EFE |
El camino de un futbolista hacia el éxito no siempre es un camino de rosas. Muchos jugadores tienen detrás de sí historias épicas, de superación, que les hacen merecedores de lo conseguido. En Vigo tenemos el ejemplo de Cristian Bustos, que escaló por las categorías del fútbol español hasta llegar a Primera División, y que compaginó durante algún tiempo su trabajo de reponedor en el Carrefour con el mundo del fútbol.
Pero no es el único ejemplo, y uno de ellos es muy actual. Se trata de Nolito, que ha tenido una vida complicada antes de ganarse el pan golpeando un balón. En una entrevista concedida al diario Marca, y firmada por Miguel Ángel Lara, el futbolista andaluz del Celta habla de uno de sus trabajos de adolescencia: “Trabajaba de carnicero y ganaba 30 euros a la semana. Me levantaba a las ocho y media, estaba en la carnicería de nueve a dos y por la tarde entrenaba en mi pueblo. Tenía 15 años y luego firmé por el Valencia. No llegué a cortar porque aquellos cuchillos eran peligrosos”, explicaba.
Mucho cambiaron desde entonces las cosas para Nolito, que pasó por el Valencia, posteriormente por la cantera del Barcelona, y entre medias se dio a conocer marcando al Real Madrid en las filas del Écija. Ahora, plenamente consolidado en el fútbol español, tiene ante sí la oportunidad de debutar en partido oficial con la selección, y según muchas fuentes será titular esta noche en León ante Costa Rica.
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