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| Foto: José Lores |
Todo entrenador está encantado con la competencia, pero cuando suceden cosas como las del pasado sábado en Riazor, solo le queda felicitarse a sí mismo y congratularse por el bien del equipo. El “Toto” decidió dejar en el banquillo a Larrivey, que arrastraba una preocupante racha de partidos sin marcar: Concretamente desde el gol anotado en el Camp Nou.
La apuesta de Charles salió bien, no solo por el gol anotado, sino porque él solo provocó la expulsión de Lopo, la segunda lograda cuando el futbolista tenía molestias físicas y estaba pidiendo el cambio. Su trabajo fue espectacular, como en él es habitual, dando clinics de juego sin balón. En esta especialidad tampoco es manco Larrivey, que entró en la segunda mitad en lugar de su rival de ataque, y fue el más listo de la clase robando el balón a Luisinho y batiendo a Fabricio para poner el 0-2 que cerraba el partido.
La apuesta de Charles salió bien, no solo por el gol anotado, sino porque él solo provocó la expulsión de Lopo, la segunda lograda cuando el futbolista tenía molestias físicas y estaba pidiendo el cambio. Su trabajo fue espectacular, como en él es habitual, dando clinics de juego sin balón. En esta especialidad tampoco es manco Larrivey, que entró en la segunda mitad en lugar de su rival de ataque, y fue el más listo de la clase robando el balón a Luisinho y batiendo a Fabricio para poner el 0-2 que cerraba el partido.
Es la situación idónea para cualquier entrenador. Si el delantero titular y el suplente marcan, y llega un momento en el que no se sabe quien es titular ni quien suplente, la salud del equipo saldrá fortalecida. Berizzo no quiso desvelar hoy quien será el titular mañana, pero sí valoró positivamente lo vivido en Riazor y también en los últimos días:
“Charles ha jugado un muy buen partido, pero quiero creer que todo el mundo está listo. Me alegro mucho por los dos delanteros que han marcado, y es muy importante para cualquier atacante. Mañana decidiremos, pero nadie debe pensar que tiene el puesto ganado ni perdido. He escuchado declaraciones esta semana que me agradan mucho, en las que uno alienta al otro. Eleva el nivel del equipo cuando un futbolista se alegra de que un compañero de equipo, que juega en su mismo puesto, marque. Es una señal de la salud del equipo”, resaltó el técnico celeste esta mañana en rueda de prensa.
Hasta la fecha, el comportamiento de ambos futbolistas, como rivales por un puesto en el once titular, ha sido exquisito, y esto es otra demostración. Podrán estar mejor o peor, pero lo cierto es que competirán de forma sana por un puesto en el once.
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