![]() |
RICARDO GROBAS |
El comportamiento del Celta en las últimas semanas ha llevado al club a cambiar de planes respecto al tipo de jugador que se requiere como refuerzo. La búsqueda de un centrocampista ha quedado aparcada. La atención de la dirección deportiva se centra ahora en la contratación de un atacante o un defensa.
Al mismo tiempo, se descarta la venta de algún jugador en el mercado de invierno, a pesar de que desde Inglaterra se apunta el interés del Swansea por Iago Aspas. El Celta desea por encima de todo asegurarse la permanencia en Primera División, por lo que no está dispuesto a dejar salir a sus futbolistas más valiosos. Tendría que ceder siempre que se hiciese efectiva la cláusula de rescisión del contrato. La de Aspas asciende a 10 millones de euros, por lo que se cree que nadie estaría dispuesta a pagarla en estos momentos.
La escasa producción en el juego atacante del conjunto que entrena Paco Herrera preocupa a los máximos responsables del club. El problema se ha acentuado y el equipo acumula ya tres partidos de Liga sin marcar un solo gol: cayó por la mínima ante el Athletic de Bilbao, el Betis y el Atlético de Madrid. Ello ha llevado a los célticos a situarse al borde de la zona de descenso: son decimoséptimos, con 15 puntos, los mismos que el Espanyol, que es antepenúltimo.
La sequía goleadora ha llevado a la entidad viguesa a modificar los planes de los refuerzos. El argentino Sebastián Prediger, centrocampista del Colón de Santa Fe, ha dejado de ser una prioridad para el Celta, aunque el presidente del conjunto vigués, Carlos Mouriño, reconociese tras la asamblea general de accionistas que se mantenían abiertas las negociaciones con el club suramericano. El jugador incluso llegó a admitir sus deseos de recalar en la Liga española después de su efímero paso por el campeonato portugués, en las filas del Oporto.
Los números del Celta en ataque son lastimosos: es el tercer equipo del campeonato que menos goles ha anotado. Su media no llega a uno por partido, pues suma 16 en 17 encuentros. Solamente dos equipos, Osasuna (14) y Granada (13), presentan peor registro.
De esta forma, el director deportivo del Celta, Miguel Torrecilla, ha aparcado el historial y las condiciones económicas que exigían los centrocampistas seleccionados, para situar sobre su mesa fichas y referencias sobre jugadores de ataque y defensas centrales.
Según las características del futbolista que ha requerido el entrenador, Torrecilla escruta el mercado futbolístico en busca de alguien con características ofensivas. No tiene por qué ser un delantero, cuya cotización aumenta en función de los goles que pueda aportar. Herrera se conforma con un jugador que aporte juego ofensivo, mostrándose indiferente al lugar que ocupe en el campo. Le da igual si se mueve por banda, en la mediapunta o en la delantera.
El técnico confía en la capacidad rematadora de Aspas. El moañés suma seis goles en la Liga pero está capacitado para incrementar mucho más su aportación si el equipo genera más ocasiones. En la temporada pasada, obtuvo 23 tantos, de los que 16 cayeron en la segunda vuelta del campeonato. El canterano cierra el año 2012 con 22 goles en Liga.
La otra posición que Herrera quiere reforzar es la defensa, pues la grave lesión de Samuel Llorca ha dejado al equipo con tres centrales específicos, cifra que el técnico considera insuficiente para abordar la segunda vuelta, teniendo en cuenta las lesiones y sanciones que se puedan producir hasta junio.
En las últimas semanas han surgido algunos candidatos para reforzar la retaguardia del Celta en enero: el lituano Marius Stankevicius, que pertenece al Lazio italiano, y el argentino Mauro Cetto, del Palermo, están en la lista de posibles fichajes.
Jaime Conde / Faro de Vigo
0 comments:
Publicar un comentario