Un necesario voto de confianza


JORGE LANDÍN 
No creo mucho en las etiquetas por la forma de pensar u opinar. En los últimos años parece que en el celtismo solo existen los Pro Mouriño o los anti Mouriño, y si bien es cierto que alguno encaja perfectamente en esta descripción, coincidiréis conmigo en que a mi pocas veces me han tachado de Pro Mouriño. Digo todo esto para que no se entienda lo que voy a decir como una defensa a ultranza del jerarca celeste, sino simple y exclusivamente como una opinión sin más. 

Quiero hablar de la política de fichajes del Celta y los nervios que le han entrado a algunos cuando estamos todavía a 29 de junio y quedan por delante más de dos meses para cerrar la plantilla y confeccionar un equipo competitivo de cara al regreso a la máxima categoría. Todavía no se ha terminado la Temporada 2011-12, lo hará mañana, y ya hay nervios entre la parroquia porque los fichajes no llegan o los que llegan no convencen. 

Creo que estaría bien que dejásemos trabajar a Torrecilla y compañía, que al fin y al cabo no lo han hecho mal otros años. De momento, que se sepa, no han cometido ningún error de calado. No se ha prescindido de jugadores importantes ni se han fichado medianías. Todo se basa en los rumores, en el run run, en lo que suena que puede llegar o se puede marchar. Creo que, a estas alturas, todos sabíamos que ese proyecto de cantera del que habla Mouriño solo está en su imaginación, por tanto no es bueno escandalizarse por fichar a un portero que suponga la salida de alguno de nuestros canteranos. Deberíamos contar con ello, y creo que el equipo, el plantel, saldrá reforzado con el fichaje de Javi Varas. 

Las  opciones de Oier y Orellana eran complicadas. El segundo no está descartado, pero ya advertimos hace tiempo que sería muy difícil su continuidad por lo elevado de su traspaso. No hay que volverse locos, las negociaciones avanzarán y a lo mejor nos llevamos una sorpresa positiva. Por otro lado, pagar 3 millones de euros por Oier sería una locura, más allá de que el Celta no ha mostrado excesivo interés en retenerlo, ni ha hecho el más mínimo intento de negociar con Osasuna. 

Por tanto, no estamos tan mal. Paciencia, ya llegarán los fichajes, ya se irá concretando el equipo, y ya veremos a día 31 de agosto si se han hecho bien las cosas o no. 

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