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Foto: Marta G. Brea |
Hablaba Paco Herrera, en la rueda de prensa posterior a la victoria sobre el Alcoyano, de los tres pasos (de gigante) que tenía que dar el Celta para lograr el ascenso directo. Es difícil expresar mejor lo que necesita el Celta para confirmarse como equipo de Primera División. Tres pasos, o tres pasitos, pero eso sí, de gigante, porque cada victoria será una zancada hacia la gloria, cada salida triunfal de Balaídos será un guiño a la heroicidad de unos jugadores que han vuelto a devolver la esperanza a toda la grada celeste.
Y hoy llega el momento de dar la primera zancada. Y no será fácil, como nunca lo es. Enfrente está un Xerez que llega envalentonado tras la última victoria sobre el Deportivo y que vive mejor ahora que ya no ha presión. Sin la losa del peligro, los jugadores del Xerez han logrado sacar lo mejor de sí mismo y querrán confirmar hoy en Balaídos, un campo atractivo para casi todos los jugadores, que hubiesen podido dar más de no ser por las extrañas circunstancias extradeportivas que marcaron durante toda la temporada al conjunto azulino.
Así pues, más vale que los pupilos de Herrera salgan al 100% desde el minuto 0. Algo parecido a la salida contra el Alcoyano, aunque enfrente habrá un equipo de mayor empaque. Pero eso sí, el espíritu debe de ser el mismo. Desde el vestuario se repite una y otra vez la misma consigna: Solo existe el próximo partido. Pues este es el próximo partido. Vamos a por la primera zancada, y luego, nos relajaremos, respiraremos hondo y daremos la siguiente. Si hasta parece fácil...
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