Oier:"Lo vivido estos días supera mis expectativas"


Foto: Marta G. Brea

Oier Sanjurjo llegó el verano pasado a Vigo con la experiencia de haber jugado en Primera División con Osasuna, club que lo ha cedido al Celta por una temporada. El defensa no se imaginaba que el fútbol gallego tuviese la dimensión que ha alcanzado en la semana previa al clásico, pues sus dos principales clubes se encuentran en momentos de decadencia, en Segunda División.

Pero Vigo y A Coruña siempre han protagonizados enfrentamientos deportivos de altura, como corresponde a dos clubes con una larga e importante trayectoria en Primera: los vigueses suman 46 temporadas en la máxima categoría, y el Deportivo, 41, y ocupan la duodécima y la undécima posición, respectivamente, en el historial de la Liga. "Lo vivido estos días ha superado mis expectativas porque me ha sorprendido bastante. Sabía que había rivalidad pero no hasta este punto. Ya se viene notando desde hace unas semanas, pero lo de esta semana ha sido algo alucinante. Se me pone la piel de gallina ver a toda la afición que ha ido a vernos al entrenamiento. Se agradece que nos apoye desde hoy, saber que están ahí, que van a ir 2.500 personas a apoyarnos [a Riazor]. La verdad es que se nota que es un partido ilusionante para todos porque hace mucho tiempo que no se juega", comenta Oier después del baño de multitudes que se dio el equipo ayer con los quinientos incondicionales que acudieron a vitorear a los jugadores a Balaídos.

En Navarra no hay clásico, pero existe rivalidad con la vecina Euskadi. Sin embargo, el lateral del Celta admite que nunca había vivido nada semejante. "Allí los partidos contra el Bilbao suelen ser bastante calientes. Se pueden asemejar a esto, pero no se pueden comparar con esto".

Para la cita de esta tarde, Oier tiene claro que es lo que le conviene al Celta: "Tenemos que conseguir que ellos se preocupen más de nosotros. Tener la pelota, como acostumbramos, y a partir de ahí creo que ellos se pueden desesperar un poco. En los primeros quince minutos, ellos seguramente saldrán en tromba y cuando vean que no tienen el control del partido y de la pelota les entrará la ansiedad, aunque el público les apoyará. Pero ellos querrán transmitirle al aficionado que tienen el control del partido y si nosotros conseguimos ese control tenemos mucho ganado, les haremos dudar. Es una buena manera para afrontar el partido". 

El zaguero celeste espera un encuentro abierto, incluso con un marcador abultado. "Vamos a intentar robarles el partido desde el principio. Los derbis no suelen ser de muchos goles pero creo que este partido tiene todos los ingredientes para que haya espectáculo y goles".

Piensa Oier que el equipo celeste está preparado para afrontar un partido de tanta tensión. "Ya somos mayorcitos para superar ese tipo de presiones o lo que pueda hacer el público o la grada. Eso lo tenemos controlado y el míster también nos lo ha dicho porque era una cosa que quería que nosotros la tuviéramos clara. Creo que estamos tranquilos y concentrados porque queremos hacerlo lo mejor posible".

Para Oier será importante el apoyo de los celtistas que acudan a Riazor. "Les pediré que nos apoyen hasta el minuto 90 porque los vamos a necesitar. Hace mucho tiempo que no se juega un partido así y es una prueba para nosotros, en un partido de alta tensión como este. Que disfruten todo lo que puedan y que nos animen porque nosotros vamos a dar la cara", promete el céltico.

Faro de Vigo 

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