El próximo mes de junio será una fecha clave para las aspiraciones de Vigo y Balaídos de convertirse en sede del Mundial de 2030. Según informó el diario Atlántico en esa fecha se sabrá si el recinto vigués supera el primer corte, que puede incluso ser definitivo, para convertirse en una de las once sedes en las que se jugará el Campeonato del Mundo.
Esta semana se celebró la primera reunión de trabajo mantenida por los responsables federativos con las 15 sedes candidatas, en las que también está Riazor, que es la otra ciudad gallega que cuenta con opciones de ser sede.
En las próximas semanas, técnicos de la Federación visitarán las posibles sedes para elaborar un informe que será clave. La visita a Vigo no tiene todavía fecha fijada. El Concello tiene pendiente concretar mediante los planes de las obras la reforma planteada para el estadio, que elevaría su aforo hasta los 40.000 espectadores con gradas supletorias.
En caso de no ser elegida sede, Balaídos cuenta con la opción de ser una de las subsedes, que albergarían partidos preparatorios para la cita mundialista. En este caso, los requisitos serán más asequibles.
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