Onésimo Sánchez vive sus primeros momentos en el Atlético Baleares, a donde llegó para intentar reconducir la situación del equipo mallorquín, que está más cerca de los puestos de descenso que de la promoción de ascenso a Segunda División. En su primer partido no le fue mal, ya que derrotó al Nàstic de Tarragona a domicilio por tres goles a uno.
En una entrevista para “Última Hora”, le preguntaron si se sintió decepcionado por el hecho de que no le ofrecieran el puesto de entrenador del primer equipo del Celta: “No fue una decepción porque nunca fue un objetivo. Firmé para estar con el filial y fueron casi tres temporadas muy buenas. Estoy contento y agradecido al club”, señala.
El técnico castellano llegó al Celta en la Temporada 2019-20, con el objetivo de salvar a un equipo que estaba en descenso. Logró sacarlo de esas plazas, y cuando estaba en mejor momento llegó la pandemia de Covid-19, que paralizó la competición. En la siguiente temporada llevó al Celta B a la promoción de ascenso, y la pasada temporada se quedó fuera en la última jornada, con un gol en el descuento. Su paso por el filial celeste fue muy bueno, pero faltó mejor relación con el técnico del primer equipo.
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