El Celta comienza este domingo (14:00) ante la Real Sociedad una maratón de partidos antes de que se paralicen las competiciones domésticas por la disputa del Mundial en Catar a finales de año. La Real Sociedad es el primer plato de un menú abundante que definirá, en gran medida, los objetivos del club de aquí a final de temporada.
El equipo de Eduardo Coudet llega a la novena jornada en la undécima posición en la tabla clasificatoria, con el descenso un poco más lejos que las posiciones europeas, en una tierra de nadie que tan poco gusta a Coudet, pero con 30 jornadas por delante es complicado saber cuál será el objetivo final del equipo.
Decía Fran Beltrán esta semana que, siendo realistas, Europa no debería ser un objetivo, al menos de forma obligatoria. Hace bien el madrileño en sacarse la presión de encima, pero serán estos seis partidos los que, en buena medida, empezarán a dar pistas sobre los objetivos reales del equipo.
Y es que, una vez superado el duro escollo de la Real Sociedad, los cinco rivales que llegarán a continuación son equipos de la zona media o baja de la clasificación, que son precisamente los que mejor se le dan al Celta desde la llegada de Coudet al banquillo.
Tras el partido ante la Real Sociedad, el Celta visitará al Valladolid, Almería y Rayo Vallecano, y recibirá en casa a Getafe y Osasuna. Los rojillos, aunque tradicionalmente son un equipo de zona media-baja han empezado la temporada a gran nivel, y desde luego no tienen esta temporada el perfil de un equipo cuyo único objetivo sea la permanencia.
Cuando se jueguen estos seis partidos ya serán catorce, más de un tercio de la competición, y con LaLiga parada durante casi dos meses será el momento de evaluar ese primer tercio, y analizar cuáles son los objetivos del equipo para lo que resta de curso. Si el Celta cumple con el guión previsto, seguramente las previsiones sean optimistas, pero primero hay que jugar estos seis partidos.
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