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| Foto: MexSport |
La Agencia EFE informó en el día de ayer que se había cerrado el acuerdo para la cesión de Rubén Blanco al Olympique de Marsella. En el momento en el que escribimos estas líneas aún no es oficial, aunque todo apunta a que lo será en las próximas horas, algo que también se podía decir ayer.
Desde que acabó la pasada temporada varios medios apuntaron a la posibilidad de que el futbolista saliese cedido este verano, aunque el club ponía como condición la renovación de su contrato, que vencía el 30 de junio de 2023. La ampliación no tardó en llegar, evidenciando que en el seno del club creen en el guardameta, renovando su vinculación cuatro años más, hasta 2027.
No parece que Coudet crea tanto en él. La pasada temporada no disputó ni un solo minuto de Liga, quedando relegado a los partidos de Copa, y el canterano temía que esta temporada, en la que se habla además de fichar a guardametas contrastados, su situación fuese similar. Por eso solicitó una cesión, para la que surgieron varios nombres, aunque ninguno del caché del Olympique de Marsella, un club de la zona noble de la Ligue 1, en la que podrá disputar competiciones europeas, ni más ni menos que la Champions League, para la que el club galo está directamente clasificado al quedar en segunda posición la pasada temporada.
Para Rubén Blanco será una oportunidad única para crecer como futbolista. Si dispone de minutos, algo que no será sencillo por la competitividad de la plantilla, regresará a Vigo con la mochila llena de experiencias que ayudarán al equipo.
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