Si el año de Iván Villar en Leganés estaba siendo complicado, con el cierre del mercado de invierno se le ha puesto un poco más difícil, por la decisión del conjunto madrileño de fichar a última hora a un tercer guardameta para el equipo. Un fichaje importante además, ya que se trata de Dani Jiménez, dueño de la portería del Alcorcón durante las cuatro últimas campañas, y uno de los arqueros más destacados de la categoría de plata.
La intención del Celta cuando cedió a Ivan Villar al equipo pepinero era que dispusiese de minutos cada fin de semana, algo que no está sucediendo. Hasta la fecha ha disputado 10 encuentros de Liga, en los que ha encajado 17 goles. Cifras mucho peores que las de su compañero Asier Riegos, que ha encajado 13 goles en 15 encuentros.
Con todo, Villar fue el escogido por Garitano tras unas primeras jornadas en las que Riesgo era el meta titular, pero con la llegada de Nafti al banquillo apenas ha jugado. Tras un partido de Copa ante la Real Sociedad regresó a la titularidad también en Liga, pero un partido para olvidar en Burgos, con un fallo grosero en el segundo gol de los burgaleses, lo ha devuelto al banquillo.
Veremos en qué situación queda tras la llegada de Dani Jiménez a Butarque, pero todo apunta a que el exmeta del Sevilla Atlético apunta a titular, por experiencia y rendimiento en los últimos años. Una situación que podría recordar a la vivida por el propio Villar cuando jugó cedido en el Levante en la Temporada 2017-18, sin entrar en las convocatorias en los últimos encuentros de Liga.
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