 |
| Foto: Ricardo Grobas/Faro de Vigo |
A falta de fichajes, y últimamente también de resultados, el celtismo tiene que conformarse con otras victorias más pequeñas. Una de ellas es la amplia presencia de canteranos en el equipo. Las estrecheces del equipo, unido a las lesiones sufridas en los últimos tiempos, obligan a Óscar García a tirar de futbolistas de filial e incluso juveniles.
Y la mejor noticia es que el rendimiento es más que óptimo. A Gabri Veiga se le vieron muy buenas maneras ante el Valencia, y firmó un gran partido frente al Barcelona. José Fontán parece un central más que preparado para asumir el reto de tener muchos minutos esta temporada. Ayer dejó muy buenas sensaciones, tanto en defensa como en ataque, donde se prodigó más de lo habitual para un futbolista de su posición.
A ellos se unió ayer Sergio Carreira, un futbolista del que hablan muy bien todos los expertos en la cantera, y que se pudo coronar en su estreno con un gol al Atlético de Madrid. El palo lo impidió, pero da la sensación de que está preparado para el reto, aunque Óscar García señaló el viernes en rueda de prensa que tiene que trabajar los aspectos defensivos propios de su demarcación.
Y queda todavía por ver la eclosión de Miguel Rodríguez, un futbolista jovencísimo con una pinta extraordinaria. Ellos se unen a los canteranos ya consolidados en el primer equipo. Ayer pudimos ver a Iván Villar, Denis Suárez, Santi Mina y Iago Aspas, más los que esperaban su oportunidad en el banquillo. Sin duda la apuesta por la cantera es clara, seguramente porque no queda más remedio, pero no es de ahora y este es un aspecto que gusta especialmente a la afición, o al menos a buena parte de ella. Además la configuración de la plantilla les obliga a dar un paso adelante para sacar una situación complicada y permitir la supervivencia del equipo en la máxima categoría.
0 comentarios:
Publicar un comentario