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| Foto: M. Moralejo/La Voz de Galicia |
La nueva normalidad durante la pandemia de Coronavirus dejó ayer imágenes muy curiosas en Balaídos. Ver el estadio completamente vacío, o en su defecto el dantesco montaje virtual de La Liga, con el himno a capela en el minuto 15 de partido y otras aberraciones, resulta bastante impactante, así como a los jugadores diseminados por la grada de río, disfrutando de sus confortables butacas.
Otra imagen que resultó curiosa fue la del palco. Allí pudimos ver a los directivos y directos del Celta con distancia social, mascarilla y los nervios de siempre. Apenas había presencia del Villarreal, con tan solo un representante en el palco de autoridades. Tampoco el Concello tuvo representación, aunque en ese sentido Mouriño y Caballero fueron adelantados a su tiempo, imponiendo la distancia social desde hace un par de años. Pocos tuvieron la capacidad de verlo como ellos.
Para el siguiente partido convendría que La Liga enfocase al palco aplicando su tecnología virtual de FIFA 98 para que todos nos parezca normal, aunque sea lo menos normal del mundo.
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