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| Foto: Atlántico Diario |
No ha sido fácil en los últimos tiempos ver la mejor versión de Stanis Lovotka. El internacional eslovaco goza de gran prestigio en el fútbol europeo. Su nombre se ha relacionado con importantes equipos, aunque ninguno ha dado el paso de ofrecerle al Celta lo que pide por él. Sin embargo, su talento es conocido por muchos directores deportivos, y también por los aficionados celestes, que echan de menos ver su mejor versión con más frecuencia.
Ayer fue un día de esos. Lobotka se creció con el paso de los minutos, apoyado en el buen partido de sus compañeros, y en la medular rival, que se prestaba para las virtudes del centrocampista celeste. El medio campo del Valencia no fue muy agresivo y eso permitió que Lobotka tuviese más espacios para pensar y encontrar a sus compañeros. Con Beltrán haciendo el trabajo sucio, lo tenía todo para destacar, y lo hizo.
Es difícil destacar a un jugador por encima del resto, pero es muy probable que Lobotka haya sido el mejor jugador del partido. Siempre es opinable, por supuesto, pero estuvo bien en casi todas las facetas del juego. Le faltó finalizar alguna que otra acción, en la que volvió a demostrar que le cuesta enganchar un buen disparo, una característica que, en caso de mejorarla, le convertiría en un futbolista aún más apetecible en el mercado.
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