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| Foto: Alba Villar/Faro de Vigo |
El Celta repitió por tercer partido consecutivo la fórmula de repartir invitaciones gratuitas entre sus abonados, con el fin de que Balaídos presente un gran aspecto. La respuesta ha ido “in crescendo” en estos tres encuentros. Se agotaron ante el Villarreal, aunque de forma más tímida, ya que su venta se prolongó durante un par de días.
Ante la Real Sociedad se agotaron a última hora de la tarde, y no estaban disponibles las localidades de la grada visitante por las reservas que había hecho la afición txuri-urdin, pero ante el Girona se agotaron las localidades prácticamente a mediodía, poniéndose entonces a la venta las localidades de la grada visitante, desértica en este tipo de partidos.
La respuesta de la afición está siendo cada vez más espectacular. Nadie se quiere perder la lucha del Celta por la salvación, porque además promete espectáculo. El equipo ha remontado en los dos anteriores partidos un resultado adverso, cabalgando a lomos de un sensacional Iago Aspas, que está haciendo historia con la camiseta celeste.
Nadie se lo quiere perder, y el Celta debe aprovechar la ola. Si son inteligentes en Príncipe, se puede sacar algo muy positivo de toda esta crisis. Muchos de los que ahora van gratis a Balaídos, se podrán enganchar el curso que viene. Siempre habrá quien se sume a ola sin más, o quien retire invitaciones para luego ponerlas a la venta acompañadas de bolis bic, pero si al menos un millar de estos aficionados se enganchan a Balaídos, habrá merecido la pena.
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