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| Foto: RC Celta |
Desde la llegada de Miguel Cardoso al banquillo celeste han sido muchos los testimonios de jugadores del equipo en los que mostraban su apoyo al técnico portugués. Parece claro que la plantilla está con él, y en gran medida fue la responsable de que siga al frente del equipo tras la última debacle del Celta ante el Levante.
Ayer mismo era Fran Beltrán quien ponía encima de la mesa este apoyado, asegurando que la plantilla “está a muerte” con su técnico. No es fácil entrar con tan buen pie en un vestuario y contar el apoyo casi unánime de todo el vestuario. Pero las palabras no llegan a todo, y hay veces en las que es necesario apoyar estos dichos con hechos.
Ha llegado el momento de que los jugadores tomen la sartén por el mango y devuelvan al entrenador su confianza con un buen partido. El Alavés siempre es un rival complicado, pero los jugadores deben dar un paso al frente y ayudar a su entrenador con resultados, dejando las palabras para otro momento.
Si quieren que siga al frente del banquillo celeste, y me consta que así es, la mejor manera de hacerlo es sumando victorias, sumando de tres en tres, y escapando de la quema del descenso. Lo tienen en su mano y deben empezar a hacerlo. Una derrota más pondría al técnico portugués al pie de los caballos. Resulta sorprendente que siga siendo el titular del banquillo, pero si alguien lo puede salvar, y no con mensajes a la directiva, son los jugadores.
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