Cabral, del todo a la nada


Foto: Levante UD
Desde su llegada al Celta, Gustavo Cabral siempre ha sido uno de los fijos para los respectivos entrenadores con los que ha coincidido en el equipo vigués. Con mayor o menor presencia, el zaguero argentino siempre acababa apareciendo en las alineaciones del equipo. Son ya seis años desde su llegada, y tiene contrato hasta el 30 de junio de 2019, pero desde el inicio de 2018 han cambiado mucho las cosas. 

Gustavo Cabral se asentó en la titularidad del equipo haciendo pareja junto a Sergi Gómez. Los dos acabaron por ser los centrales más valorados por Unzué después de realizar muchas probaturas a comienzos de temporada. Roncaglia apenas contaba, y el rendimiento de Fontàs era un motivo para que el catalán no saliese de inicio. 

Pero entonces apareció Roncaglia. El internacional argentino pasó del ostracismo absoluto a la titularidad, y aunque inicialmente parecía que el sacrificado sería Sergi Gómez no fue así. Roncaglia entró en el once por Cabral, que no es titular desde el partido contra el Levante, pero hay que tener en cuenta que en ese partido, junto con los tres primeros de año, Unzué rotó al tener copa entre semana. 

En Anoeta debía elegir pareja siendo Sergi Gómez y Roncaglia los elegidos. Desde entonces ha disputado tres encuentros el equipo sin que en ninguno de ellos apareciese Cabral, que está ahora mismo lejos de la titularidad. Al menos si el técnico celeste mantiene su criterio en próximas fechas. Viendo su trayectoria es sorprendente. Acumula 196 partidos oficiales, y ha vivido buenos momentos en el club. 

A sus 32 años, parece que debe dejar paso a generaciones más jóvenes, encarnadas en la figura de Sergi Gómez, que ha jugado junto a él muchos partidos, y que con su estilo, se está convirtiendo en el central más seguro de la zaga celeste. 

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