Sergio y el mes de enero

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Sergio Álvarez fue uno de los nombres propios del Celta la pasada semana. La oferta de renovación del equipo vigués decepcionó al meta de Catoira, quien tras 14 años en el club esperaba otro tipo de oferta por parte del club. Un año y condiciones salariales equivalentes a las de esta temporada, esa ha sido la propuesta céltica, rechazada inicialmente por el meta. 

El futbolista no pide más dinero, a pesar de ser uno de los jugadores peor pagados de toda la categoría, sino más años de contrato, lo que demostraría un verdadero interés por parte del Celta en su continuidad. No es habitual que en Praza de España ofrezcan un año de contrato a un futbolista, y mucho menos que la propuesta se la pase el director deportivo, ya que lo habitual es que sea el Director General quien se la presente. 

Esos han sido los principales motivos por los que Sergio descartó aceptar la primera propuesta y espera una segunda que encaje con sus pretensiones. El de Catoira nunca ha ocultado que uno de sus deseos es cerrar su carrera profesional en el Celta. Nunca lo ha tenido fácil para seguir, y han sido varias las veces en las que la oferta ha llegado casi a última hora, pero ahora entiende que es distinto, y por eso, según informaba Faro de Vigo este fin de semana, el jugador no va a esperar mucho y valorará ofertas a partir del 1 de enero, fecha en la que puede negociar con otros equipos. 

Su situación ha cambiado con respecto a anteriores renovaciones. El cancerbero ha hecho una gran Europa League, competición en la que fue elegido en el equipo ideal por parte de la UEFA. Muchos equipos apuntaron su nombre a la vista de sus actuaciones en partidos importantes, especialmente la vuelta ante el Shakhtar Donetsk, donde salvó al equipo con sus paradas. Por eso tuvo ofertas este verano, y espera tenerlas también a partir del mes de enero. Aunque pareciese imposible hace unos meses, el futuro de Sergio está cada vez más lejos del Celta, pero si el club le ofrece más años de contrato seguirá.