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| Foto: LFP |
Se complica seriamente la continuidad de Sergio Álvarez en el Celta. El guardameta celeste acaba contrato el 30 de junio de 2018, y todo apunta a que no aceptará la oferta de renovación del Celta, al menos si hacemos caso a las informaciones publicadas por La Voz de Galicia, en las que aseguran que la oferta del Celta es por un año más sin mejora salarial.
Decepcionado por el ofrecimiento, Sergio está dispuesto a barajar otras opciones. Su buena campaña pasada, destacando especialmente en la Europa League, hace que pueda resultar atractivo para algún equipo, mucho más sabiendo que llegaría sin coste alguno. A sus 31 años sabe que un portero tiene por delante mucho tiempo.
De todos modos, este es el primer acercamiento del Celta, y entendemos que no será el último. Sergio llegó al Celta en edad juvenil, y convive con el primer equipo prácticamente desde la llegada de Carlos Mouriño a la presidencia. Por entonces formaba parte del filial, pero entrenaba habitualmente con el equipo grande.
Sus renovaciones han llegado casi siempre sobre la bocina, y no es la primera vez que se daba casi por hecha su salida. Durante estos años ha aceptado casi todo lo que le ha ofrecido el club, lo que le ha llevado a ser uno de los jugadores con el salario más bajo de toda la categoría. Después de seis años como portero de Primera, tal vez lo más justo sea ofrecerle algo mejor.
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