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| Foto: Miguel Riopa/Getty Images |
El error de Jonny marcó el partido ante el Genk, y marcará la eliminatoria, ya que el tanto encajado por el Celta limó la ventaja que tenían los célticos, que se podían permitir incluso perder en Bélgica, y ahora saben que la derrota mínima puede apearles de una competición en la que han puesto grandes esperanzas.
Esta mañana, el técnico argentino restó importancia al fallo cometido por su pupilo. “Lo hablamos, lo conversamos. Son errores que no queremos que pasen, pero son propios de un momento del partido, que por más teoría o revisión previa necesita de ese momento exacto. Es un error de comunicación. Trato de ser tolerante con el error porque sucede cuando uno menos se lo espera, soy intolerante con la falta de actitud o concentración, pero frente al error técnico, paciencia y a corregir”, argumentó el preparador argentino.
El segundo gol del Genk llegó tras un centro de Trossard, Jonny deja salir el balón, inconsciente de que detrás de él está Buffel, que remata a puerta, Sergio despeja y Jonny sigue aún pensando en el fallo anterior y no llega al segundo rechace donde ya no perdona el futbolista belga. Un gol bastante tonto, que dificulta el pase a la siguiente ronda y al que Berizzo ya ha dado carpetazo.
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