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| Foto: Octavio Passos/Getty Images |
Sergio lo ha vuelto a hacer. El meta de Catoira es un experto en sorprender a todo el mundo, y aparecer cuando menos se le espera. En esta ocasión ha aprovechado la lesión de Rubén Blanco, que definitivamente no tiene fortuna con las lesiones, para mostrar un gran nivel, que le hace acreedor de una titularidad que había perdido a favor de su compañero en la portería.
No es la primera vez que hace algo así, y siempre sale airoso de las peores situaciones. Sin duda, Sergio, como buen gato, tiene 7 vidas, y aunque ya ha perdido alguna por el camino, da la sensación de que le quedan unas cuantas de las que podrá tirar de aquí a su retirada como futbolistas profesional.
Ayer, a pesar de que el Alavés no le exigió demasiado, ya que sus llegadas fueron escasas, el de Catoira volvió a ser providencial con dos intervenciones que evitaron sendos goles del Alavés, goles que habría que remontar en la vuelt, y que complicarían mucho el partido. Buena noticias para el Celta, que se encuentra con el mejor Sergio de la temporada, en un momento clave de un curso que puede ser histórico.
Ayer incluso se mostró bastante solvente, y sobre todo valiente, en el juego aéreo. Y no es fácil mostrar tal valentía en un partido que, en caso de perderlo, supondría un revés importante para el equipo y la afición. Este es Sergio.
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