 |
| Foto: RC Celta |
Carlos Mouriño presentó ante la ciudadanía de Vigo su proyecto. El Presidente céltico vive unos días frenéticos, compartiendo su proyecto con varios colectivos, pero tenía claro que el día de hoy era especial. Eso sí, su comparecencia nos dejó pocas novedades: “El Celta tiene el arraigo sentimental, pero no el físico que lo ancle a la ciudad”, insistió: “Mi obligación es poner todas las trabas para eliminar la posibilidad de que mañana se cambie al Celta de la ciudad”, explicó.
El mandatario utilizó la estrategia del ahorro del Concello como argumento: “Podemos comprar al Concello el estadio y liberar a la ciudad del pago de la reforma, el mantenimiento”, y recordó todos los proyectos que no ha podido sacar adelante en los último tiempos: “Estamos cansados de ofrecer propuestas. Ni una ni otra, ni otra, ha sido mucho trabajo de despacho”, afirmó.
Uno a uno fue desgranando los proyectos fallidos para la ciudad deportiva: “Valladares era imparable… Gastamos en un proyecto que no empezó y aún no sabemos por qué. Propusimos un proyecto impresionante en la fábrica abandonada de Álvarez, una transformación increíble para Vigo. Ilusión tras ilusión perdida. El Colegio Hogar, un proyecto que habría llevado a Vigo y al Celta a otra dimensión”.
0 comentarios:
Publicar un comentario