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| Foto: Atlántico Diario |
Tras el amistoso ante el Sporting de Braga, el Celta cerró la semana de trabajo con una sesión de entrenamiento en A Madroa. Tras este entreno, los futbolistas tendrán tres días de descanso, que les vendrán muy bien para recargar las pilas antes de empezar a preparar el partido del Eibar, a la vuelta del parón por los partidos internacionales.
El descanso, y poder tener un fin de semana libre, será un buen regalo para los jugadores, que están viviendo una temporada muy exigente, con partidos en tres competiciones. Sobre esta dureza habló ayer Carles Planas en rueda de prensa: “Sabíamos que sería un año muy complicado por competir también en Europa, pero estamos en buena posición en Liga y en Europa, estamos sacando puntos. Y a nivel de juego, hemos tenido partidos mejores y peores. Después el equipo se fortaleció y hemos sacado muchos puntos”, apuntó.
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