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| Foto: Ferrol 360 |
Los partidos amistosos están para este tipo de cosas, especialmente cuando faltan muchos titulares y el entrenador decide probar a 11 jugadores del filial, y a los que menos minutos tienen dentro del primer equipo. No son partidos para realizar probaturas tácticas, sino sencillamente para ver jugadores, y mantener el tono físico.
El rendimiento de los jugadores que debían reivindicarse fue muy variable. Naranjo volvió a dejar la sensación de que está lejos de su mejor momento, Lemos cumplió, pero el que salió ganador fue Josep Señé. El centrocampista catalán, que negocia su renovación con el Celta estos días, se reivindicó con dos goles y un rendimiento muy interesante, convertido en el auténtico líder del equipo.
Además de los dos goles, Señé tiró del equipo, e incluso gozó de ocasiones para anotar alguno más. El ariete céltico es un jugador con una gran capacidad para crecer, razón por la que el Celta se fijó en él y decidió, primero ficharlo para el filial, y posteriormente darle la alternativa en el primer equipo, donde este curso está gozando de más minutos que el pasado, aunque el regreso al equipo de Orellana puede cerrarle las puertas.
Sea como fuere, en Casa Celta tienen claro que a sus 24 años, Señé es una joya aún por pulir. Necesita experiencia en Primera, debe ganarse los minutos que le permitan crecer y seguir desarrollando sus virtudes. También tiene áreas de mejora. Berizzo está trabajando en ellas. El preparador argentino confía en él, y le está ayudando a mejorar como futbolista. Con partidos como el de ayer, es muy probable que no cesen las oportunidades.
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