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| Foto: Marta G. Brea // Faro de Vigo |
El Celta se juega en San Mamés (domingo 12:00) gran parte de sus opciones de acabar la temporada quinto, evitando la previa de la Europa League sin depender de lo que haga el Sevilla en la Copa o en la propia Europa League. Para ello será necesario puntuar, al menos, en un escenario muy complejo, y en el que ganar o puntuar no es nada sencillo.
Berizzo lo tiene claro, y por eso saldrá con un once muy potente en busca de la victoria, que dejaría a los vigueses con una diferencia que acercaría la quinta plaza, sin olvidar la cuarta posición que daría acceso a la Champions League.
Varias dudas quedan sobre el once que pondrá en liza el “Toto” en San Mamés. En la portería sigue la política de rotaciones asimétricas, que podrían llevar a Sergio o Rubén Blanco a la titularidad. También en el lateral izquierdo se ha generado cierta duda después de que el lunes pasado fuese Planas el titular, y arriba falta confirmar si finalmente Guidetti estará en el equipo o esperará su momento en el banquillo.
El técnico argentino jugará con tres hombres arriba, y muy probablemente con Orellana en banda, y no en la mediapunta. Eso llevaría al sueco al banquillo y daría la oportunidad a Wass para volver al once inicial. El sueco es uno de los jugadores más regulares del equipo y el “Toto” lo sabe.
Cuando se acabe el encuentro tendremos más o menos claras las aspiraciones del Celta en la recta final de la Liga. Para la quinta plaza un empate puede ser bueno, pero no lo será para pelear por la Champions. La posibilidad de ganar, ponerse a un punto del Villarreal y meterle presión, está ahí, pero para ello hay que ganar, y solo se hará, como decía Berizzo en la rueda de prensa previa, jugando muy bien.
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