El Celta se quita de encima el problema Yelko

Foto: Atlántico

El capítulo de Yelko Pino no pasará a la historia del Celta como uno de los más gloriosos. El canterano aún puede resarcirse, tendrá oportunidades en el futuro para cambiar su sino, pero ha entrado con muy mal pie. Peor imposible. El Celta, literalmente, se lo ha quitado de encima, ha solucionado un problema enviando lo más lejos posible a quien lo generaba, bajo su punto de vista. 

Una cesión siempre es un recurso interesante para un equipo que necesita que aquellos jugadores que no cuentan para el primer equipo continúen su formación. El caso de Yelko ha sido diferente. Su testarudez le sirvió para aprovechar el tremendo error del Celta, que aventuró que estaría formado para esta temporada y le ofreció hace tres años un contrato profesional para la 2015-16. Yelko se aferró a su contrato aunque no contaba para Berizzo, ni tampoco para el club al no haber completado las etapas lógicas en un proceso formativo. 

No contaba ni para los amistosos, pero tampoco accedía a jugar en el filial. El pulso acabó con Yelko Pino en un equipo de la tercera división inglesa en el que no podrá jugar hasta el mes de enero. ¿Por qué cederlo ahora?. Es evidente que todos se han quitado un problema de encima. El jugador por estar en un entorno complicado, con los compañeros aconsejándole que bajase al filial, y el club por tener a un jugador con el que no contaba y que le había ganado un pulso casi pueril. 

Yelko consiguió ser jugador de la primera plantilla, aunque eso fuese en su contra. La formación que tendrá en el Swindon Town será peor que la que podría tener en el filial, con los técnicos del primer equipo viéndolo todos los fines de semana, e incluso entrenando con el primer equipo. El mayor proceso de mejora se obtiene con el entrenamiento diario, compitiendo cada día con jugadores de una categoría superior. Ahora se entrenará con jugadores de Tercera División, sin opción de competir en la máxima categoría. Eso sí, tendrá una experiencia vital impagable, que le servirá para madurar. No le vendrá mal al fin y al cabo.