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| Foto: David Ramos |
La Temporada 2014-15 dejará para el recuerdo, entre otras cosas, el mejor tridente en la historia del fútbol. El que forman Neymar, Messi y Luis Suárez, suman 120 goles a falta del partido que el próximo sábado disputarán ante la Juventus con el cetro continental en juego. La MSN como se le ha dado en llamar, superó el anterior registro que habían firmado Ronaldo, Benzema e Higuain con 117 goles, marcando distancias en la final de Copa del pasado sábado ante el Athletic.
Un trío letal, casi imparable, que sin embargo palideció ante el Celta, tanto en Barcelona como en Vigo, donde fueron incapaces de marcar ningún gol. En el partido de ida, que se jugó en el Camp Nou, tanto Neymar como Suárez gozaron de ocasiones, pero unas veces el palo y otras Sergio Álvarez impidieron que acabaran en el fondo de las mallas. Neymar comenzó a desesperarse con Hugo Mallo, y se olvidó de jugar al fútbol, especialmente en la segunda mitad donde se le notó bastante desquiciado. Jonny también contuvo bien a Messi, y Suárez atravesaba una pequeña sequía.
La zaga céltica se impuso, con un Sergio colosal, y además aprovechó la conexión de la NOL, para que Larrivey anotase tras impecable taconazo de Nolito, el gol de la victoria en el Camp Nou, que conquistaban los vigueses 73 años después de que dos goles de Roig derrotasen al conjunto catalán en el antiguo estadio de Les Corts.
En la vuelta jugada en Balaídos, el Celta volvió a atar en corto a las tres estrellas azulgranas. Messi apenas logró un disparo entre los tres palos, y se molestó bastante con Jonny por intentar -y lograr- frenar su juego. De la actuación de Neymar poco hay que decir, salvo que lo más reseñable fue que le lanzó los mocos a Hugo Mallo, y Luis Suárez tampoco mojó. Eso sí, la zaga céltica se despistó y permitió que Mathieu apareciese por sorpresa para marcar el gol de la victoria catalana. Los puntos hubiesen sido importantes, pero la historia recordará que el tridente más letal fue frenado por el Celta.
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