![]() |
Foto: FDV |
Recuerdo cuando por motivos de trabajo tuve que vivir muy lejos de casa. Tenía que hacer malabares para poder ver al Celta por la tele, y ya ni te cuento para enterarme del día a día del club. Está claro que fuera de Vigo y comarca, es muy difícil estar al tanto de lo que ocurre en casa Celta, y que todo va encaminado a la información del Barcelona y del Real Madrid.
Ahora mi vida es mucho más fácil. Aquí en casa somos más, y por eso todo gira en torno al Celta. Sin ir más lejos, por imprevistos de esos "familiares" (Tebas nunca tiene en cuenta a mi familia cuando pone los horarios), el otro día seguí el Celta - Barça por la tele en un bar de los alrededores de mi casa. Pude ver únicamente la segunda parte. Al llegar al bar, por los comentarios que escuché, me di cuenta que eramos mayoría celtista aplastante. La segunda parte transcurría entre los ruidosos ¡uysss! de la mayoría celtista y los menos ruidosos de la minoría culé..........hasta que llegó el gol de los de azulgrana. En ese momento me di cuenta de mi error: Volvía a ser un celtista en minoría. Lo que yo había identificado como mayoría celeste, resultó ser merengue a juzgar por los gritos de "¡segundones!" que los culés les dedicaban y la respuesta acerca de las copas de Europa que los primeros daban.
El miércoles siguiente, superado ya el shock, me preparé para ver el partido contra el Granada, ajeno a la coincidencia cósmica que me iba a dificultar tan a priori sencilla actividad, y es que jugábamos a la misma hora que el Real Madrid (si es que somos unos provocadores). Como lamentablemente sé como van esta cosas, ya busqué directamente un bar con dos televisiones, donde la "secundaria" no se viese demasiado mal, tanto por tamaño como por ubicación. Lo encontré, y allí estaban los "celtistas" del día del Barcelona, que en esta ocasión eran del Madrid (cosas del viento, supongo). Para ser exactos, sólo mi suegro y yo estabamos viendo al Celta, y el resto (15 "personas"), al Madrid. Se da la circunstancia que el Madrid acabó antes y sus "siareiros" abandonaron el bar sin preocuparse por el Celta, si, repito, los que eran más Celtistas que yo el domingo anterior.
Y llegó el Rayo. Nubes negras se cernían sobre Balaidos porque el rival históricamente nos solía dar para el pelo. En el segundo 22 nos cayó el primero...el resto lo sabéis y hay gente que os lo sabrá contar mucho mejor que yo (el listón no está muy alto). Del día del rayo me quedo con dos cosas:
1.- La protesta contra Tebas que propusieron las peñas: se puede estar o no de acuerdo, y somos libres o no de secundarla, pero la actitud de animar sólo por el hecho boicotear la medida y esperar para abrir la bolsa de pipas en el minuto 13 es patético. Esa es la gente que nunca pisó Balaidos en segunda. Éramos 8000 pero todos dicen que iban, es el efecto PP, que nadie lo vota pero tiene mayoría absoluta-
2.- ¿ahora qué?....Todos de Mina y de toda la vida ¿verdad?....anda que no se han escrito tonterías sobre el chaval.
0 comments:
Publicar un comentario