Levante 0 - Celta 1 [Premio a la ambición]


Foto: Celta
El fútbol premió esta tarde en el Ciutat de Valencia al equipo que quiso ganar, y castigó la racanería de un Levante que se conformó con el empate desde el primer minuto. Berizzo puso en liza un equipo muy ofensivo, pensando en llevar el peso del partido, y así fue. El Celta propuso fútbol, creó las mejores ocasiones, muchas de ellas marradas de forma increíble, y acabó encontrando el premio de la victoria a cinco minutos del final con un tanto de Charles. 

Berizzo no engañó en sala de prensa cuando dijo que el Celta saldría a jugar. El argentino es un entrenador poco corriente, capaz de salir a jugar como visitante con seis hombres de ataque. Augusto, Krohn-Dehli y Orellana en el centro del campo, y en ataque Santi Mina, Nolito y Larrivey. Demasiado para un Levante que bastante hizo con llegar vivo hasta el minuto 85. 

El partido tenía un condicionante importante en el estado del terreno de juego, por las lluvias caídas sobre Valencia. En algunas zonas estaba realmente impracticable, y con el paso del tiempo se puso muy pesado. El balón no circulaba bien, y era necesario adaptarse a esa circunstancia. Los “tocones” del Celta fueron encontrándose más cómodos con el paso de los minutos. 

La primera ocasión del Celta llegó gracias a una vertiginosa arrancada de Santi Mina, que se fue en velocidad, ganó por fuerza a los zagueros rivales, y falló en la definición ante Mariño. Fue la primera demostración de que el Celta iba a por el partido, y lo siguió intentando en los minutos siguientes, si bien le faltaba algo de profundidad. A los 27 minutos, Nolito casi aprovecha una buena combinación celeste. 

Alrededor de la media hora de juego, el partido se embruteció. Los granotas abusaban de la violencia para detener al Celta, y el cuadro de Berizzo entró en su juego. El fútbol se afeó, hasta los instantes finales de la primera mitad, cuando Orellana tuvo una gran ocasión tras una inteligente acción de Jonny, que vio el carril central libre y asistió al chileno, cuyo disparo impactó contra la madera. 

Tras el descanso, el Celta salió decidido a aprovechar el primer cuarto de hora para sentenciar la contienda. En los primeros compases llegaron ocasiones claras en las botas de Nolito o Krohn-Dehli, pero seguía fallando la definición.  A los 12 minutos del segundo tiempo, Orellana cometió un error imperdonable al fallar una asistencia antológica de Nolito. El chileno, con toda la portería para sí, no encontró los tres palos. 

El Celta no pudo aprovechar el arreón inicial de la segunda mitad, y el cansancio se notaba en sus piernas. Lo aprovechó el Levante para generar un par de ocasiones, pero el Celta se rehizo gracias a una acción de Nolito, muy activo en la segunda mitad, que intentó el gol olímpico. Lo evitó Mariño con un paradón. Cinco minutos después le puso otro gol a Orellana, pero el chileno, totalmente solo en el área levantinista, remató muy flojo. 

Berizzo decidió mover el banquillo ante el cansancio del equipo, dando entrada a Pablo Hernández en lugar de Santi Mina, con lo que Orellana volvía a la banda derecha, y el “Tucu” se colocaba como enganche. No tardó en llegar el segundo cambio con la entrada de Charles por Larrivey. Pablo Hernández, sobre todo, le dio un nuevo aire al equipo. El chileno, a su ritmo, supo dotar al equipo de mayor potencial ofensivo, e incluso provocó un penalti que no vio Teixeira Vitienes. 

A cinco minutos del final, gran acción del Celta. El propio Hernández vio por el rabillo del ojo la entrada de Nolito, y el andaluz puso un balón a Charles que no dejó pasar. El brasileño no perdonó a Mariño y puso el 0-1 que llevaba la justicia al marcador. El Levante se acordó entonces de que en el campo contrario había una portería, pero para entonces estaba demasiado lejos de crear peligro. Incluso pudo el Celta matar en alguna contra, donde el vigués Mariño volvió a lucirse ante un disparo de Nolito. 

Victoria justa, inapelable, de un Celta que demostró hoy que no está para competir por la permamencia. Su guerra es otra, no sabemos cuál, pero desde luego no la de sufrir y estar pendiente de los resultados de otros equipos. Los célticos llegan al parón con 35 puntos, viendo el futuro con mayor tranquilidad para preparar el partido de dentro de quince días ante el Barcelona. Pero eso será otra historia. 


Ficha técnica 

LEVANTE: Mariño, Morales, Navarro, Ramis, Toño, Simao, Diop (José Mari, min.55), Xumetra (El Zhar, min.66), Barral, Rubén García (Rafael Martins, min.82) y Uche

CELTA: Sergio, Hugo Mallo, Fontàs, Cabral, Jonny, Augusto, Krohn-Dehli, Orellana, Santi Mina (Pablo Hernández, min.73), Nolito y Larrivey (Charles, min.77)

Goles: Charles, 0-1 (min.85)

Árbitro: Fernando Teixeira Vitienes, del colegio cántabro. Amonestó por el Celta a Larrivey, Hugo Mallo y Jonny y por el Levante a Toño, Barral y Diop

Campo: Ciutat de Valencia

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