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| Foto: Atlántico |
La larga pretemporada que ha llevado a cabo el Celta este verano empieza a dar sus frutos. Los futbolistas del equipo vigués llegan al inicio del curso en plenitud física y uno de los que más están rentabilizando el duro trabajo desarrollado en las últimas cinco semanas es Manuel Agudo 'Nolito'.
Al gaditano nunca le ha faltado calidad, pero para explotarla necesita esa punta de velocidad que marca la diferencia entre un regate fallido o dejar a un defensa a la espalda. Y este año, Nolito parece andar mucho más ligero que el anterior, una gran noticia para el Celta si es que finalmente se queda.
Después de los tres goles que marcó en Liverpool al Everton, el de Sanlúcar volvió a ser ayer el mejor del equipo. Habilidoso en el ataque y trabajador a la hora de defender, participó en el juego mucho más que sus compañeros en la línea ofensiva y resultó decisivo.
Nolito falló en la primera parte un mano a mano con el guardameta Fabricio, después de un buen pase de Álex López y un amago de Larrivey. Iba a ser su último error. Nada más empezar el segundo tiempo, estuvo listo al borde del área para hacerse con un pase atrás de Juan Domínguez, se acomodó el balón y sacó un disparo que sorprendió a Lux.
Con el 1-0 y un Deportivo más manso que en la primera mitad, el Celta se relajó, pero no así Nolito, que lo intentó cada vez que tuvo la pelota en los pies, en solitario o asociándose. Como en el segundo gol celeste, que llegó en una jugada que inició el propio futbolista gaditano con un medido pase a Fabián Orellana. El chileno centró y Larrivey culminó la acción con un remate en el área pequeña.
Mucho se ha hablado este verano, y se seguirá hablando hasta el día 31, de la posible salida de Nolito a un club de mayores posibles. Sería la peor noticia que podrían recibir el equipo vigués, su entrenador, Eduardo Berizzo, y toda la afición. Que se quede.
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